Las bateas de ostra y mejillón, así como las embarcaciones de artes menores, siguen sufriendo de manera preocupante los efectos del temporal. Si el viernes se hablaba de al menos una docena de viveros flotantes a la deriva en la ría arousana -muchos de ellos siguen aún varados en la costa- y del hundimiento de numerosas naves en distintos puertos, puede decirse que ayer ocurrió otro tanto de lo mismo.

Prueba de ello es que la empresa "Hércules Servicios Marítimos", asentada en el Concello de Rianxo y dirigida por Ricardo Alcalde Ordóñez, recibió -solo ayer por la mañana, por lo que pueden ser muchos más- avisos para intervenir con su barco "Hércules" en el rescate de cinco viveros flotantes que se soltaron de sus fondeos en aguas de O Grove y de uno procedente de los polígonos bateeiros de Vilagarcía.

A esto hay que sumar los avisos que se están haciendo a "Hércules" para reflotar embarcaciones, y también los que se realizan a otras empresas especializadas.

"Fue una noche muy movida, y todo indica que los problemas continuarán unos días más", declaraba Ricardo Alcalde, sabedor de que no solo se trata de viveros flotantes a la deriva, sino que "se están produciendo importantes desprendimientos de mejillón en las cuerdas y hay muchas bateas que han sufrido graves desperfectos".

En cuanto a los barcos hundidos, parece que los problemas volvieron a ser intensos en Porto Meloxo (O Grove), donde algunos marineros señalan que hace ya un año solicitaron a Portos de Galicia "que situara el pantalán en una zona más abrigada, ya que cada vez que hay viento del sur o del oeste tenemos que escapar para el puerto de O Corgo porque tenemos miedo a permanecer aquí". Lo que sucede es que "el presidente de Portos no responde y se dedica a ir de feria en feria, en lugar de atender las necesidades de la flota profesional".

Estos marineros aprovechan para decir que "ahora Portos también planea desplazar un pantalán de O Corgo que se estaba usando para almacenar aparejos, y quiere hacerlo sin consultar con el sector y sin tener en cuenta que esa estructura sirve de abrigo ante los vientos del este, lo que significa que si lo quitan aumentarán los problemas también en ese puerto".

Algunos armadores dicen llevar "tres noches durmiendo en los muelles por miedo a que el temporal destroce nuestro medio de vida". Como destrozó algunas señales marítimas, entre ellas una boya luminosa -la que indicaba la entrada al muelle de Pedras Negras a estribor- arrastrada por el oleaje hasta la arena de la playa de Raeiros.