El corazón de Vilagarcía se cierra al tráfico. Además de quedar prohibida la circulación, la emblemática plaza de Galicia se somete a una importante mejora estética y funcional para convertirse en un espacio enfocado al disfrute de las personas, con una combinación de zonas verdes, hormigón de distintas tonalidades y láminas de agua que permitirán que el epicentro de la ciudad regrese, en la medida de lo posible, a sus orígenes, antes de que proliferasen los rellenos sobre el mar. "A Rey Daviña se le llamaba la calle del río porque por debajo de ella pasaba un cauce y queremos hacer una recreación de cómo iba el agua en esa zona", expone la concejala de Urbanismo, Paola María, que ayer presentó junto al alcalde, Alberto Varela, el proyecto de peatonalización de la plaza de Galicia.

Para simular el cauce, el proyecto elaborado por el arquitecto Mariano Vázquez contempla la construcción de una fuente justo en la entrada a Rey Daviña que se completará con otras zonas de captación de agua que aparte de recrear el río están pensadas para que los días de lluvia recojan esas pluviales y así ayuden a aliviar la red de alcantarillado con el propósito de reducir el riesgo de inundaciones en esta "zona cero". No obstante, la edil Paola María admitió que es imposible erradicarlas debido a la situación de la plaza (al igual que Rey Daviña, cuya peatonalización tampoco acabó con las riadas, se encuentra por debajo del nivel freático).

Las obras de peatonalización y humanización se desarrollarán en el último tramo de la calle Padre Feijóo (desde el cruce con Edelmiro Trillo) hasta la intersección con Conde Vallellano. Es decir, desde la farmacia del edificio Lara hasta la tienda de deportes.

Acceso para carga y descarga

Ese eje en forma de "ele" quedará vetado al tráfico, si bien se permitirá el acceso a garajes y para realizar labores de carga y descarga, como en el resto de calles peatonales de la ciudad. En este sentido, el alcalde recalcó que los comercios no tienen de qué preocuparse, sino todo lo contrario, pues espera que la peatonalización total de la plaza de Galicia sirva de revulsivo para los negocios locales. "Hoy por hoy nadie cuestiona una peatonalización", dijo Alberto Varela en alusión a la contestación social que en su día recibió la humanización de Rey Daviña, actualmente convertida en la indiscutible arteria comercial de Vilagarcía.

El gobierno socialista se basó en tres premisas claras que el arquitecto Mariano Vázquez plasmó en el proyecto "perfectamente", según resaltó la concejala de Urbanismo. Una de esas ideas fundamentales es que la zona a humanizar sirva de nexo de unión entre las dos peatonalizaciones previas. Para ello, la superficie se construirá en hormigón tintado, un material que permite trabajar con múltiples texturas y colores para poder integrar la plaza de Galicia en Rey Daviña. "Necesitamos materiales que perduren en el tiempo y no que en cinco años estén deteriorados. En un clima como el gallego no podemos poner madera ni tampoco pizarras de poco grueso debido al paso de vehículos", explicó el regidor.

Habilitar zonas verdes era otro de los requisitos imprescindibles, pues tal y como se refleja en la revisión del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), la capital arousana adolece un déficit de vegetación en los espacios públicos. Y la tercera premisa es la relacionada con las aguas y el saneamiento. De hecho las zonas verdes proyectadas son totalmente permeables.

La concejala de Urbanismo, Paola María, precisó que se prevé la plantación de árboles de hoja perenne y otros de hoja caduca para que en función de la época del año la foto de la plaza de Galicia varíe. "Además aportan un juego de luz y color", opina la edil socialista, que agrega que en la fuente se proyecta vegetación fluvial.

Evidentemente en el mobiliario urbano no faltarán bancos ni papeleras. El gobierno socialista apuesta por un lugar en el corazón de la ciudad "en el que puedan jugar los niños y sus padres estar tranquilos".

Cruzar hacia A Baldosa

Entre las curiosidades del proyecto destaca la adaptación del espacio para conservar las actuales zonas de mayor tránsito peatonal. "No solo cruzamos hacia Rey Daviña, sino también en diagonal hacia A Baldosa", ejemplifica Paola María.

De hecho en su día, el anterior gobierno liderado por Tomás Fole cambió de ubicación el paso de peatones de la plaza de Galicia porque la mayoría de los ciudadanos cruzaban en la entrada de Rey Daviña, junto a Zara, donde por ese motivo hoy en día se encuentra el paso de cebra.

Otra de las particularidades de la peatonalización total de la plaza de Galicia es que las zonas de captación de agua mencionadas anteriormente se proyectan para estar llenas y también vacías. Aparte del agua de la lluvia, "también se puede echar agua de la traída", sostiene la concejala socialista.

El alcalde vilagarciano, por su parte, destacó que la humanización de la emblemática plaza de Galicia es una muestra más del "modelo de ciudad que queremos". "Una Vilagarcía más accesible y atractiva", resumió. Este proyecto se suma a los ya finalizados o en ejecución de la Praza da Peixería, del Castro de Alobre, las obras de accesibilidad en la parada de autobuses de O Cavadelo o en las aceras de la calle del asilo Divina Pastora.