El gobierno de Vilagarcía impulsa un frente común con los otros dieciséis ayuntamientos gallegos afectados por el ERE en Eptisa para buscar apoyo en la Xunta, administración que subvenciona la redacción de los planes urbanísticos de los concellos, por tanto también le atañe la nueva situación de la empresa, inmersa en un ERE tras ser adquirida por el grupo chino JSTI.

Desde el Concello explican que después de que el alcalde Alberto Varela diese a conocer "la incertidumbre" en la que quedaba el PXOM de la capital arousana tras la compra de Eptisa por el gigante empresarial chino, "la voz de alarma saltó entre los otros 16 concellos de Galicia que también tienen adjudicada a la empresa la redacción de sus planes generales de ordenación municipal".

Preocupado por la situación, el primer edil vilagarciano ya contactó con regidores -de distinto color político- de otros municipios afectados (entre ellos los pontevedreses de Nigrán y Gondomar) con la intención de organizarse para mantener una reunión conjunta con la Secretaría Xeral de Urbanismo de la Xunta.

Desde Ravella recuerdan que para los municipios elaborar un PXOM "es una obligación legal", así como también lo es ajustarlo a los cambios normativos que va realizando la administración autonómica, como por ejemplo a la nueva Lei do Solo de Galicia, a la que ha tenido que adaptarse el documento vilagarciano, inmerso desde 2008 en un largo proceso de revisión.

Añaden desde el Concello que la importancia que tienen los planeamientos urbanísticos es la razón por la que la Xunta colabora con las entidades locales subvencionando los complicados trabajos de redacción de los documentos. "Y en este punto, la administración autonómica es una afectada más", consideran fuentes municipales.

La idea de los 17 municipios de cuyos planes generales se encarga Eptisa es trasladar su preocupación a la Xunta y determinar entre todos las posibles medidas a tomar para garantizar la continuidad de la redacción de los documentos.

Explicaciones individuales

Aparte de este frente común de los concellos para buscar el apoyo de la administración autonómica y así hacer una mayor presión ante Eptisa para que cumpla los contratos, la junta de gobierno local de Vilagarcía, tal y como anunció el alcalde la semana pasada, acordó en su sesión semanal celebrada ayer dirigirse por escrito a la nueva dirección de la empresa para que de manera oficial aclare si está en disposición de continuar con la revisión del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) arousano "cumpliendo con los plazos previstos y en las mismas condiciones y con los mismos recursos especificados en el contrato firmado en su día por ambas partes".

El ejecutivo socialista considera "básico y fundamental" conocer los planes de Eptisa para poder decidir, "si es necesario" -puntualiza-, los siguientes paso a dar, ya que el equipo de Alberto Varela no quiere que el Plan Xeral acumule más demoras para poder someterlo a aprobación inicial del pleno en el actual mandato, que expira en 2019.

Por tanto mientras la nueva dirección de Eptisa no concrete si va a continuar con la redacción del PXOM de Vilagarcía y en qué condiciones, el Concello poco margen de maniobra tiene.

El mejor de los escenarios sería que Eptisa continuase al frente de la revisión del documento y con el mismo equipo. De mantenerse el contrato, el alcalde pedirá a la empresa que concrete por los cauces oficiales cuántas personas dedicará al plan vilagarciano y especifique los plazos de entrega de las distintas fases de los trabajos que quedan por hacer.

En el caso de que la consultora no se comprometa a cumplir los plazos, Ravella tendría que volver a sacar a concurso público la redacción del plan desde el punto en el que se encuentra, lo que retrasaría el proceso ya que el nuevo equipo tendría que ponerse al día de todo lo realizado. Parece inevitable que cualquier decisión que tome Eptisa supondrá algún tipo de demora en la tramitación del PXOM.