En torno a medio centenar de padres de alumnos de Carril protagonizaron a primera hora de esta tarde un acto de protesta frente al colegio de la localidad, que quiere establecer dos turnos para las comidas de los niños, de media hora cada uno.

Los padres sacaron a sus hijos a la calle a la hora en que debían pasar al comedor, y les dieron unos bocadillos para simbolizar que media hora es un tiempo insuficiente para que puedan comer niños de corta edad, más teniendo en cuenta que en ese tiempo deberán también asearse y lavarse los dientes.

Los escolares comieron sus bocadillos sentados en la acera, frente al colegio, mientras los de mayor edad y algunos padres sostenían algunas pancartas en las que se leían lemas como "No somos pavos de Navidad. No engullimos" o "No somos ganado".

Los padres contaron con el respaldo de varios concejales de la corporación (del equipo de gobierno, del BNG y de Esquerda Unida), así como del vicepresidente de la confederación gallega de asociaciones de padres de alumnos, que tildó de "dantesco" el hecho de que los niños tengan que comer en media hora.

Lo que solicitan los usuarios es que la Consellería de Educación habilite a las 14.15 horas un autobús para aquellos niños que no quieran quedarse en el comedor, pues actualmente hay casos en que son usuarios del servicio no porque sus padres no puedan comer con ellos por razones de trabajo, sino porque no pueden ir a recogerlos a esa hora al colegio, con lo que se ven obligados a inscribirlos en el comedor.

Según la asociación de padres de alumnos, si la Xunta habilitase ese autobús de retorno a las 14.15 horas (actualmente solo funciona el de las 15.15 horas, y está reservado para los usuarios del comedor) varios niños podrían ir a comer a casa, con lo que bajaría el número de usuarios en el comedor escolar, y no sería necesario establecer dos turnos, de media hora cada uno.