El turismo verde o medioambiental es una fórmula que parece cobrar cada vez mayor protagonismo entre los establecimientos de O Grove. La posibilidad de surcar la ría de Arousa, las ventajas que ofrece la península meca para los amantes de la ornitología o la opción de disfrutar del paisaje en A Toxa, Siradella o Con da Hedra, por poner algunos ejemplos, ganan peso en la oferta de los hoteles para temporada baja y puentes festivos como los previstos para la semana que viene.
Lógicamente, estos alicientes se suman a otros muchos de especial relevancia en esta época del año, como la gastronomía, con el centollo como gran referencia, o la oferta balneoterapéutica, con A Toxa y sus aguas mineromedicinales como principal destino en el municipio.
Esta diversificación de la oferta, que lógicamente contribuye a la desestacionalización de la actividad turística, es una de las claves planteadas hace solo unos días en la charla organizada en O Grove por el Club Faro, en colaboración con el Concello y la Diputación de Pontevedra.
Ese foro, que contó con la intervención del consultor de proyectos turísticos Eduardo Martínez Domínguez y de la profesora de Publicidad y Relaciones Públicas María Isabel Míguez González, sirvió para llenar de empresarios del sector la Sala das Cunchas de la casa consistorial, ya que el contenido del mismo había despertado enorme expectación.
Aunque ya se informó de ello en su momento, cabe recordar que se pusieron sobre la mesa algunas de las herramientas fundamentales para planificar el turismo del futuro en la localidad.
Y entre ellas destacaban tanto la apuesta por la preservación del medio ambiente como la valorización de los recursos naturales, la explotación de la ría como destino y la implicación máxima de cada negocio en Internet.
De este modo salía a relucir el positivo ejemplo de establecimientos como el hotel Louxo La Toja, gracias a su activa y completa presencia en la red.
Ahora puede ponerse nuevamente como ejemplo de todo lo demás, es decir, de todo lo relacionado con el disfrute de la ría, pues este cuatro estrellas lanza ofertas especiales para el puente de la Constitución y toda la semana entrante que tienen mucho que ver con el turismo medioambiental.
Una de las propuestas del Louxo es el "Plan un día sin alojamiento", que permite viajar a bordo del barco pesquero rehabilitado Chasula para surcar la ría, descubrir aves y participar en una degustación a bordo de dicha embarcación-escuela.
Es un itinerario "exclusivo" de "turismo activo" que se presenta como una ruta de dos horas y media de duración, con salida desde el puerto pesquero de O Grove, "para descubrir las rías gallegas, islas, playas, ensenadas y faros sumergiéndose en el entorno y el medio marino".
El citado plan promocional del Louxo incluye además la posibilidad de disfrutar de un programa de talasoterapia a base de sesión de talaso, aplicación de parafango marino y masaje parcial.
Todo ello acompañado de un almuerzo en el restaurante del propio hotel, el Rías Gallegas, con un menú a base de vieiras asadas sobe puré de calabaza y apionabo con escabeche de almendras; lomo de merluza al vapor con berberechos, crema de guisantes y ajada; filloas rellenas de crema con salsa de chocolate blanco y toffe; vino albariño y café.
Este proyecto del Louxo La Toja es solo un ejemplo de lo que supone diversificar la oferta aprovechando las potencialidades existentes en la península meca y la ría de Arousa. Y lo mejor de todo es que otros establecimientos del sector empiezan a seguir las mismas pautas.
