Fue la auténtica sensación de la pasada Navidad, convirtiéndose en una visita obligada durante los meses de diciembre, enero y febrero. Ese éxito alcanzado por la aldea de los elfos del Xardín Umbrío no pasó desapercibida para el Concello de Vilanova de Arousa, que va a volver a colocar la pequeña representación, aunque en esta ocasión, será una aldea permanente, con varias viviendas y figuras en las que se recreará toda la magia de unas fechas como las navideñas, pero "también alegrará todo el año a los más pequeños del municipio".

Así lo reconoce el alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, cuyo grupo de gobierno ha optado por reproducir a escala esta pequeña aldea, desaparecida desde el pasado mes de febrero, a consecuencia de los daños causados por el constante uso de los niños y que obligaron al Concello a retirarla.

"Aquella era una composición provisional, pero ahora vamos a aprovechar una ayuda de otra administración para que se convierta en un espacio permanente en el que los más pequeños puedan jugar y divertirse".

La aldea estará lista en las próximas semanas y se convertirá en un atractivo más de un Xardín Umbrío que Ramón María del Valle-Inclán nunca llegó a imaginar.

La idea de colocar una aldea de elfos de Papá Noel en este punto del casco urbano de Vilanova, nació en el seno del gobierno municipal.

Tenía como principal objetivo ofrecer a los vecinos algo más que el tradicional alumbrado navideño que acostumbra a lucir en gran parte de las principales calles del municipio.

La idea fue tomando cuerpo hasta que se consiguieron varias casas de pequeñas dimensiones y un reno para impresionar a los más pequeños durante las pasadas fiestas navideñas.

Desde el primer día que se abrió al público, la pequeña aldea de los elfos se convirtió en un continuo peregrinar de niños que no pasó desapercibido para el grupo de gobierno local. Fue ese hecho lo que motivó que comenzasen a plantearse la posibilidad de convertir este espacio en permanente y que sirviese para protagonizar una época del año tan mágica como es la Navidad.

Al quedar como permanente, la de Vilanova se unirá a otras iniciativas similares que ya existen en la comarca de O Salnés, como es el caso de la aldea Grobbit que existe en A Toxa, en el Concello de O Grove, puesta en marcha desde hace varios años y que se convirtió en uno de los puntos más visitados del municipio en los últimos años.