El proceso de venta directa de una casa de Bemil (Caldas de Reis) que se le embargó a la trama de blanqueo de dinero de "Pelopincho" y que albergó en su día un club de alterne ha quedado desierto, después de que no se presentase ninguna oferta económica por ella. El Plan Nacional sobre Drogas (PNSD) ya intentó vender este inmueble en al menos dos ocasiones anteriores, pero en ninguno de ellas despertó interés de los compradores. La primera fue mediante el sistema de subasta, y las dos siguientes fue un proceso de enajenación directa. Esta es la fórmula que se utilizó la última vez, pero de nuevo sin éxito.

El establecimiento había sido tasado por 141.300 euros, y la oferta mínima que admitía el Plan Nacional sobre Drogas era de 70.650 euros. A partir de esa oferta, el inmueble se le adjudicaría al postor que ofreciese la mayor cantidad de dinero. Pero no hubo ninguno. Así las cosas, el departamento perteneciente al Ministerio de Sanidad prevé volver a sacar a la venta la casa, pero ahora con un precio aún más rebajado.

José Antonio Pouso Rivas, "Pelopincho" es un presunto narcotraficante natural de Ribeira que amasó una enorme fortuna con el tráfico de estupefacientes, y que lleva en paradero desconocido desde 2010, hasta el extremo de que fuentes policiales han dicho en alguna ocasión que lo más probable es que esté muerto. Fue condenado por blanqueo al igual que numerosas personas de su entorno, que habrían actuado como testaferros.

Es el caso de la vivienda de Bemil, que estaba a nombre de una mujer vinculada a "Pelopincho". Situada en el lugar de Paradela, tiene una superficie de 169 metros cuadrados, y está dentro de un solar de casi 1.200 metros cuadrados. Hace años albergó un club de alterne llamado "Fuego Latino", cuyos responsables actuales se desvinculan de la trama de "Pelopincho", alegando que ellos solo tenían alquilado el edificio.

Lotes más pequeños

La justicia embargó a Pouso Rivas un enorme patrimonio inmobiliario, formado por pisos, naves industriales o locales comerciales en pueblos como Caldas, Valga, Pontecesures, Ribeira o Vilagarcía. El Plan Nacional sobre Drogas ha tenido desde el primer momento muchas dificultades para vender este patrimonio, por lo que han optado por sacarlo a subasta o en procedimientos de enajenación directa en lotes más pequeños. Fue así, por ejemplo, como encontraron comprador para los cinco locales que "Pelopincho" tenía en el Centro Comercial Arousa, de Vilagarcía.