La Sociedad Española de Ornitología (SEO/BirdLife) explica que las aves migradoras tienen áreas o cuarteles de cría, que utilizan en primavera y verano y donde se reproducen, y también zona de invernada, para resguardarse ante los rigores del invierno.

Así las cosas, los desplazamientos que se producen entre ambas zonas son los denominados movimientos o viajes migratorios, de tal forma que los realizados a final de invierno o principios de primavera desde el área de invernada a la de cría se conocen como migración primaveral o prenupcial, mientras que los que tienen lugar en la época actual, es decir, a finales del verano o principios de otoño, constituyen la migración postnupcial u otoñal.

Pues bien, en la ruta migratoria de muchas especies está Galicia, y entre las zonas de esta comunidad que reciben una mayor afluencia de aves se encuentra la península meca, tanto si se trata áreas integradas en el Complejo Intermareal Umia-O Grove como incluidas en el Complejo Ons-O Grove o bien en la Reserva Ornitológica O Grove, gestionada por SEO/BirdLife.

Quiere esto decir que el actual momento del año resulta especialmente propicio para disfrutar del contacto con la naturaleza observando aves, que es algo que además de SEO destaca y aconsejan el propio Concello, a través de su Programa de Inversión Ornitológica (PIO), y también la Xunta, por medio de Galicia Birding.

En este último caso sitúan los humedales del municipio grovense, y particularmente la ensenada de O Vao, entre los "puntos espectaculares" de Galicia "para la observación de aves en migración".

Como ejemplo destacan en Turismo de Galicia que "en estos lugares se concentran gran cantidad de limícolas; pequeñas aves que, pesando unos pocos gramos, son capaces de volar distancias increíbles como la que separa Siberia de la costa occidental africana".

Además de recomendar la visita a humedales costeros como los de O Grove, otra opción planteada es disfrutar del fenómeno de la migración en el mar.

Por tal razón citan al Cabo de Estaca de Bares como punto de paso de "varios millones de aves marinas por temporada, lo que lo convierte en el mejor punto de todo el Atlántico Europeo para la observación de alcatraces, pardelas cenicientas, capirotadas, negrones comunes, charranes comunes y árticos, gaviotas tridáctilas o págalos". Pero aunque sea una excursión interesante, en realidad no es necesario irse a Estaca de Bares, pues desde O Grove también pueden verse muchas de esas especies. Y desde luego todas ellas -y alguna más- pueden encontrarse en las expediciones que se realizan desde esta villa a bordo del pesquero "Chasula", que patroneado por Isidro Mariño avanza 12 millas mar adentro sobre la plataforma continental para, precisamente, toparse con las aves pelágicas y/o en plena migración.

Enlazando esto con las explicaciones de SEO/BirdLife, cabe apuntar que los interesados en presenciar los movimientos migratorios tienen un margen considerable de tiempo para hacerlo, pues "se dividen en etapas que suelen durar varios días o incluso semanas".

Esto hace que muchas de las aves que en esta época viajan desde los países del norte europeo al sur o incluso hacia África, como también las que huyen del frío ártico hacia Europa, deban detenerse a descansar y alimentarse en las denominadas "áreas de reposo o de sedimentación", las cuales "resultan muy importantes para que el viaje llegue a buen término", y que en el caso de Galicia encuentran una buena representación en la ensenada grovense de O Vao.

Hay que tener presente, como indica SEO, que "muchas especies de aves y miles de individuos abandonan las zonas más norteñas, con inviernos más desfavorables, y viajan a latitudes del centro y sur del continente Europeo, al igual que de estas latitudes, aparentemente más propicias, desaparecen numerosos ejemplares de otras especies que viajan al continente africano". ¡Y en O Grove pueden verse algunas".