El Día Mundial sin coches se convirtió ayer en un ensayo general de cómo serán la Plaza de Galicia y la Independencia peatonalizadas, la segunda solo en parte. El Concello cerró al tráfico estos y otros viales del centro de Vilagarcía, como Conde Vallellano, con lo que pretendía convertir a los peatones en "los únicos protagonistas de las calles", así como "poner de manifiesto la idoneidad de las peatonalizaciones para contribuir a la consecución de una ciudad más amable y humana". Aunque entre las 16 y las 21 horas únicamente estaba permitida la circulación en estas zonas para entrar o salir de garajes, transporte público o emergencias, fueron muchos los conductores que se saltaron a la torera las indicaciones, sobre todo a primeras horas de la tarde, y sorteando las vallas pasaron igual con sus vehículos por la Plaza de Galicia, por poner un ejemplo.

Los viandantes y ciclistas se convirtieron, así, en los principales usuarios de los viales y plazas más céntricas, en lo que se ideó como una celebración dentro de la Semana Europea de la Movilidad, cuyos actos arrancaron el pasado sábado con un paseo nocturno en bicicleta. El gobierno de Alberto Varela defiende el "impacto positivo que una movilidad inteligente puede tener para la economía, el medio ambiente y la salud de las personas".