Los vertidos incontrolados, uno de los principales problemas que afectan a zonas forestales de Vilagarcía, son objeto de una campaña municipal, impulsada por el Concello y que cuenta con la colaboración de la empresa pública Seaga. Se actuará en seis puntos negros previamente identificados y localizados por la concejalía de Medio Ambiente, encargándose de las tareas de eliminación de los vertederos operarios de una empresa que siguen los criterios marcados por Seaga. Las zonas a limpiar son la subida a O Pousadoiro, Renza, las inmediaciones del campo de fútbol del Coruxo (Cornazo), el entorno de Pinar do Rei, el camino de Bamio a la carretera de Xiabre y las proximidades del antiguo campo de fútbol de Trabanca Sardiñeira.

Los trabajos no se limitan a una mera recogida y retirada de la basura acumulada, sino que se realiza ya una separación en origen de los residuos en base al material del que se trate -escombros, muebles de madera, electrodomésticos...- y se trasladan a un centro de tratamiento o gestor autorizado. Una vez erradicado el vertido y en las zonas más degradadas, técnicos de Seaga evaluarán la conveniencia de realizar un aporte de tierra vegetal para facilitar el crecimiento de nueva vegetación y contribuir a una mejor y más rápida regeneración del medio natural. En algunas zonas la retirada de la basura ya se ha realizado, es el caso de la subida a O Pousadoiro, un tramo situado entre la carretera vieja y la capilla del pazo, donde los operarios acometieron tareas de limpieza el lunes y el martes. El miércoles y ayer se trasladaron al entorno de Pinar do Rei, en donde eran bastantes los vertidos que contaminaban la zona, tal y como publicó esta misma semana FARO DE VIGO. En próximas jornadas continuarán los trabajos hasta completar las seis zonas.

Desde finales de 2015

Aunque la campaña se acomete ahora, el gobierno local explica que los trabajos previos "comenzaron a finales del pasado año a raíz de la problemática existente en Cornazo, donde el Concello tuvo que actuar con sus propios medios en otoño de 2015 para limpiar el vertedero ilegal situado en las inmediaciones del campo de fútbol del Coruxo". Fue entonces cuando el departamento de Medio Ambiente informó a la Xunta de la situación, remitiéndole más tarde un listado de puntos negros localizados en el término municipal. El plan de erradicación de los vertidos se gestó en varias reuniones entre responsables de Seaga y personal municipal. De hecho, entre los meses de diciembre y enero realizaron varias visitas a las zonas afectadas para establecer la geolocalización de los focos y realizar los informes pertinentes previos a su eliminación.