La isla estandarte del turismo en Galicia ha vuelto a verse afectada por la acción de los gamberros, o mejor dicho, por la imprudencia de algunos conductores temerarios que no dudan en utilizar las carreteras de A Toxa como si fueran circuitos.
Sucedió en la noche del martes, pero no es la primera vez que ocurre algo así y se denuncia la presencia de turismos e incluso motos que participan en carreras -lógicamente ilegales- u organizan "exhibiciones" para tratar de demostrar su pericia al volante o en el manillar.
Las quejas de residentes y turistas por el ruido que escuchaban parecen haber alertado esta vez a los servicios de vigilancia de la isla, que dispone de seguridad privada propia, y también a las fuerzas de seguridad públicas, como la Policía Local.
Los mayores problemas se registraron a la altura de los campos de tiro y el palacio de congresos y exposiciones de la isla, donde hay una gran plaza con un farola en medio, a modo de rotonda. Es ahí donde algunos se dedicaron a hacer trompos y otras peligrosas maniobras con sus coches, además de circular a elevadas velocidades por otros puntos de este territorio insular actualmente plagado de turistas, como sucede en prácticamente todo el municipio grovense.
Las fuerzas de seguridad tuvieron que intervenir para dar con los autores de estos hechos, identificarlos y sancionarlos, motivo por el cual se organizaron diversos controles, tanto en la rotonda situada en las proximidades de la capilla de conchas como en la entrada del puente de A Toxa.
Tras lo sucedido muchos recordarán que en O Grove ya se vivieron episodios semejantes con anterioridad, como por ejemplo las carreras de coches y motos -algunas de gran cilindrada- que se llevaban a cabo en el año 2009 en la conocida como Carretera do Conde. En aquella ocasión el Concello pidió la implicación de la Guardia Civil después de que los vecinos denunciaran que "entre las once de la noche y la una o las dos de la madrugada, sobre todo en fin de semana, suelen producirse carreras que ponen en peligro a los peatones y afectan a los vecinos que duermen en sus casas".
