Miembros de la Protectora de Animales de Cambados se acercaron esta mañana a Portonovo para organizar una actividad con los niños participantes en el programa de conciliación "Paifillonai", que la pasada semana montaron un puesto de venta de limonada para conseguir fondos para la Protectora. Esta mañana le hicieron entrega de los 180 euros conseguidos, que serán destinados al mantenimiento de las instalaciones que la Protectora tiene en Cambados.

Olga Costa, responsable de organización cambadesa, fue la encargada de dar en primer lugar una charla a los escolares para explicarles conceptos tan básicos como la forma adecuada de acariciar y saludar a los animales en la calle. Les hablaron sobre todo de la responsabilidad que supone tener una mascota en casa, de la obligatoriedad de llevarles a revisiones veterinarias y de garantizar su higiene.

Desde el primer minuto de llegada de los animales al centro escolar, la sintonía entre los perros y los más pequeños fue absoluta, volcándose con caricias y gestos de afecto que se reprodujeron a lo largo de la mañana.

Los animales que la Protectora trasladó a Portonovo demostraron tener diferentes habilidades. Todos ellos fueron abandonados y cuidados por personal de la entidad cambadesa, uno de ellos incluso necesita una prótesis móvil para desplazarse, pero también todos participan en programas de terapia asistida.

Los escolares del Paifillonai ya estaban predispuestos a recibir con cariño a unos animales que han padecido maltrato, pero los perros se ganaron su admiración en poco tiempo.

"Nos encanta realizar esta actividad con niños porque ellos son el futuro. Si les formamos en el respeto a los animales conseguiremos reducir el número de abandonos". Olga Costa agradeció a la Concejalía de Benestar, promotora del "Paifillonai", la posibilidad de introducir este trabajo con los perros como una forma de trabajar varios valores. "Agradecemos muchísimo que se permita a los niños hacer una actividad como la de la venta de la limonada para recaudar fondos. No solo porque ellos se conciencian sino porque exponen ellos mismos a los adultos que compraron el refresco cuál es la problemática de los perros abandonados".

La concejala de Benestar, Sandra Fernández Agraso, que acudió a Portonovo para comprobar personalmente como interaccionan los perros con los escolares, agradeció también a la Protectora el importante trabajo que está realizando para favorecer la integración y la supervivencia de animales abandonados