El posible cierre de la escuela unitaria de Xil conlleva además una preocupación importante entre los vecinos de Meaño, en tanto en cuanto su complejo cuenta con instalaciones que son parte activa del movimiento social y cultural del ayuntamiento.

El hecho de que en Xil no haya asociaciones vecinales con locales propios hace que cualquier tipo de reunión o manifestación cultural se realice en el salón de actos y el propio local social de la escuela unitaria de Xil.

Este temor sobre la pérdida de los únicos lugares de encuentro de los vecinos de la localidad ya generó un movimiento social de protesta hace ahora dos años. Por aquel entonces se realizó una recogida de firmas que contabilizó un total de 266 apoyos que fueron entregados en la Delegación de Educación.

Tampoco se descarta, al igual que en la anterior ocasión, solicitar el apoyo del gobierno municipal para poner freno a una medida que parece estar totalmente encarrilada en base al informe que solo recoge cuatro matrículas al no contemplar como alumnos seguros a los hijos de la maestra.