La crisis económica ha servido para destapar las importantes deudas que acumulan los Concellos, surgidas a raíz de la época de vacas gordas en los que no se ponía coto a las inversiones, muchas de ellas sin sentido. Esos excesos han dejado varias arcas municipales en una situación muy problemática que el Ministerio de Hacienda chequea al término de cada ejercicio. De hecho, los datos del pasado año indican que todos los Concellos de la comarca han conseguido reducir, en mayor o menor medida, la deuda que acumulan sus arcas, aunque esta continúa siendo muy alta en algunos casos.
El informe anual del Ministerio se centra en la deuda bancaria, destacando el hecho de que Vilagarcía posee la cuantía más importante de la comarca, con un agujero en sus arcas de 12.504.000 euros, situándose en la tercera posición de la provincia y en el 284 de los Concellos con mayor endeudamiento de todo el Estado. Entre los diez primeros del ranking se encuentran otros dos municipios de O Salnés, como son los de Sanxenxo (5º) con 10.440.000 euros de deuda, y Vilanova de Arousa (7º), que tiene pendientes de pago un total de 6.923.000 euros. En el lado contrario destacan los municipios de Meaño y Ribadumia, que no presentan ningún tipo de deuda con entidades de crédito al cierre del pasado ejercicio.
En el informe del Ministerio también se destaca que todos los Concellos de la Comarca de O Salnés redujeron la deuda durante el ejercicio 2015. Ese hecho ha permitido que se haya pasado de los 42,5 millones de euros que estaban constatados como deuda de los municipios en el ejercicio 2014, a 36,3 millones en la actualidad.
En este aspecto hay que destacar al Concello de Vilagarcía, que durante 2015 consiguió reducir su deuda bancaria en 2,9 millones de euros. Pese a la importante cantidad, Vilagarcía no ha sido el municipio de O Salnés que más ha reducido su deuda bancaria porcentualmente. Este ha sido A Illa de Arousa, que redujo su deuda en un 31,47%, mientras que en el lado contrario se sitúa Vilanova, cuya amortización durante 2015 fue tan solo del 5,42%, todo ello a pesar de ser el tercer Concello de la provincia con mayor deuda per cápita y el séptimo por importe, lo que le ha llevado a situarse en el puesto 452 de los municipios con mayor deuda acumulada del Estado.
Deuda por habitante
Una de las cuestiones en las que se centra el informe del Ministerio es en la deuda que cada municipio posee por habitante. Ese ranking lo lidera en la provincia de Pontevedra el Concello de Catoira, que debe unos 1.369 euros por habitante, mientras que Vilanova se sitúa en la tercera posición del ranking, con 664 euros de deuda por cada uno de sus vecinos. El municipio que gobierna Gonzalo Durán ha conseguido bajar un puesto en el ranking con respecto a 2014, cuando se encontraba en la segunda plaza de los morosos de la provincia, al rebajar esa deuda en unos 30 euros.
El endeudamiento de Sanxenxo por habitante lo ha situado en la cuarta plaza del ranking de la provincia, con una cifra de 600 euros por cada uno de sus vecinos, mientras Vilagarcía cae a la décima posición, pasando de los 408 euros que debía en 2014 a los 333 de 2015. O Grove, cuya deuda es de 3,5 millones de euros, ocupa la undécima plaza, con 328 euros de deuda por habitante. En mejor situación se encuentran los municipios de Cambados, Meis y A Illa. La villa del albariño tiene una deuda de 147 euros por habitante, mientras que la de Meis se sitúa en los 133. En A Illa, la deuda es de tan solo 34 euros por habitante, cuando en 2014 era de 39,35.
El caso de Vilanova viene a constatar las dificultades que ha encontrado el municipio en los últimos años para hacer frente a los pagos debido a su complicada situación económica. Además, en esta deuda con las entidades bancarias figura el crédito que tuvo que solicitar el Concello parta hacer frente a la adquisición del pazo de Vista Real, toda vez que el desarrollo del centro comercial de San Miguel de Deiro, con el que se pretendía amortizar ese coste, se acabó frustrando.
Uno de los municipios que más ha conseguido reducir la deuda es el de Cambados, tal y como señala el responsable de la Concejalía de Facenda, Xurxo Charlín. El edil apunta que "tenemos una deuda heredada de la gestión del Partido Popular que alcanzaba los 2.435.000 euros y que hemos conseguido reducir en 400.000 euros, amortizándola según las tablas que tenemos fijadas". La reducción de la deuda que se marca el Concello cambadés es que al cierre del ejercicio 2016 esa deuda se encuentre en los 1,7 millones de euros.
Charlín reconoce que "no nos encontramos en una mala situación económica, ya que no somos de los municipios más endeudados, pero estos datos echan por tierra la opinión de algunos sobre que Cambados no tenía ningún tipo de deuda y que las arcas municipales se encontraban totalmente saneadas".
