El episodio de biotoxinas que afecta al mejillón parece que empieza a remitir. Y es que ayer se levantó la veda en cinco polígonos de la ría de Arousa, y en otros dos se produjeron las primeras analíticas negativas. Si estas se confirman en las próximas horas, la Xunta también autorizaría la extracción de mejillón en ellas.

La biotoxina tenía parado al sector bateeiro gallego desde hace días, pues los únicos polígonos de mejillón que estaban abiertos eran los de la ría de Ares-Betanzos, con una producción muy inferior a las de las Rías Baixas. Pero pasado el mediodía de ayer el Instituto Tecnolóxico de Control do Medio Mariño (Intecmar) autorizó la extracción de mejillón en cinco áreas más, todas ellas situadas en la ría de Arousa. Son A Pobra G, A, C y E.1 y Vilagarcía B2. En lo que atañe a los primeros negativos, estos se registraron también en la ría de Arousa, concretamente en los parques A Pobra H y B.

Esta sensible mejoría de la situación se produce en un momento en el que un gran número de mejilloneros de la ría habían decidido aprovechar el parón obligado por la biotoxina para realizar trabajos de mantenimiento y puesta a punto de sus embarcaciones. Estos días se ven un buen número de barcos en muelles como el de O Xufre, en A Illa, donde los armadores y tripulantes se encargan de pintarlos, limpiarlos o realizarles pequeñas reparaciones en tierra.

Una actividad que quizás cambie desde esta mañana, regresando a los muelles las descargas de mejillón, con mayor intensidad si cabe pues la veda de las últimas semanas hizo que el mercado haya quedado prácticamente desabastecido de mejillón gallego fresco.

El afloramiento de biotoxinas en primavera es habitual, y los bateeiros están acostumbrados a los parones que impone. En cualquier caso, la situación todavía no está encauzada, habida cuenta de que siguen cerrados más del 85 por ciento de los 52 polígonos de bateas de mejillón que hay en Galicia. Los únicos que están abiertos son los cinco de la ría de Arousa que abrieron ayer por orden del Intecmar, y los dos de Ares-Betanzos. Entre tanto, todavía no hay visos de mejora ni en la ría de Pontevedra ni en la de Vigo, entre las cuales suman 20 parques de cultivo.