La parroquia de Simes prepara el cambio del suelo de su iglesia parroquial, un templo considerada una de la joyas románicas de la comarca de O Salnés. Con tal motivo el cura párroco Juan Ventura Martínez Reboiras mantenía esta semana una reunión con la parroquia a la que asistieron medio centenar de feligreses que mostraron su disponibilidad a colaborar con la obra. Y es que este templo parroquial tiene un suelo de terrazo, material que no guarda consonancia alguno con el conjunto artístico, y que fue dispuesto, según recuerdan los vecinos de más edad, hace unos 50 años.

Es por ello que el cura párroco abanderó un proyecto para cambiarlo y, a través del concello de Meaño, la parroquia una subvención de 3.000 euros para tal fin, comprometida por parte del anterior equipo de gobierno de la Diputación de Pontevedra. Ese dinero se destinaría a una primera fase en incluiría toda la zona el presbiterio y las escaleras de acceso al mismo, dejando la nave para una segunda que se desarrollaría más tarde.

El cura párroco se entrevistaba ayer mismo con los responsables de Patrimonio para obtener las autorizaciones pertinentes para la ejecución del proyecto en su integridad. "Es algo en lo que venimos trabajando desde hace año y medio -explica Juan Ventura Martínez-. De hecho, dado el retraso de la autorización para actuar en el presbiterio, fue necesario solicitar una prórroga que nos fue concedida por la Diputación para invertir la subvención, por cuanto el plazo para ello vencía en diciembre parado. La obtuvimos y disponemos ahora hasta el mes de junio para ejecutarla".

El párroco apunta que, no obstante, Patrimonio exige la realización de unas "catas" en el suelo de la iglesia "para comprobar lo que existe debajo del firme antes de ejecutar cualquier obra. "Para ello -continúa el sacerdote- debemos contratar a un arqueólogo que emita un informe sobre lo hallado en las catas, y será entonces cuando tengamos la autorización para todo el proyecto, y ese es el punto en el que precisamente nos encontramos".

El cambio del suelo conllevaría levantar la capa de terrazo y disponer en su lugar otra a base de piedra del país abujardada según las directrices que marque Patrimonio. La inversión de la primera fase, que es la del presbiterio, está presupuestada en 4.000 euros. "Es cierto que la Diputación nos aporta 3.000 -apunta Juan Ventura Martínez- pero los 1.000 restantes, más las catas y los honorarios del arqueólogo que son a mayores, tendrán que ser aportados por los vecinos, por lo que calculamos que al final la parroquia financiará en torno al 50 por ciento de la inversión". "En la reunión que mantuve con la parroquia -reconoce- comprobé la buena disposición de los vecinos, lo cual agradezco, pero también soy consciente que es la primera fase, sobre la segunda no me hago cábalas, tendrá que esperar a que haya dinero, porque Simes es una parroquia pequeña, de poco más de un centenar de casas, y el esfuerzo que tienen que hacer para una obra como esta que al final puede rondar los 10.000 euros o más, es de por sí importante".

En el futuro la remodelación integral del atrio, construyendo un acceso para discapacitados, entiende que "sería lo ideal, pero eso supondría muchísimo dinero y, aunque no debemos perderlo de vista, tendría que estudiarse a largo plazo porque este templo románico se lo merece".