Desde el sector de la hostelería se posicionaron rotundamente en los últimos días en contra de modificar la ordenanza y permitir pernoctar en autocaravanas en la localidad. Los empresarios dijeron sentirse perjudicados por esta medida y por la creación de zonas especialmente acotadas para estos vehículos, tal y como propone Esquerda Unida. Pero no todos opinan así, ni mucho menos. Parece que cada vez son más los hosteleros, restauradores e incluso dueños de supermercados, pequeños comercios, bares y todo tipo de negocios que salen en defensa de los autocaravanistas, ya que "a nosotros también nos dan de comer".
Quienes así se posicionan alegan que "es un turismo por el que también debe pelear O Grove, ya que si conseguimos atraer las rulós vamos a conseguir que más gente pase por nuestra calle, coma en nuestros restaurantes y compre en nuestras tiendas".
Hay incluso ejemplos concretos, como el de cafeterías cuyos dueños alegan que "cuando vienen autocaravanas a O Grove desayunan en nuestros establecimientos, y esa es una ganancia que no tendremos si impedimos que estos vehículos disfruten de O Grove".
La moción presentada por el esquerdista José Antonio Otero pide que se modifique la "Ordenanza de policía y buen gobierno", de tal modo que se permita que las autocaravanas "puedan pasar la noche en nuestro concello, habilitando dos zonas, una en la parroquia de San Martiño y otra en la de San Vicente, donde les esté permitido a estos vehículos estacionar y pasar la noche, con un máximo de usuarios".
A esto se suma la petición de áreas de servicio para autocaravanas "que cuenten con agua potable, arqueta para aguas grises, otra para vaciar las aguas sucias y señalización en la que se indiquen las normas de uso y posibles sanciones, siempre en consenso con la Asociación Galega de Autocaravanas o la Federación Española de Asociaciones Autocaravanistas".
"Una cosa es no dejar dormir en las autocaravanas, lo cual puede regularse, y otra es impedir que estacionen de noche en nuestro pueblo", espetan algunos empresarios.
