El demoledor informe de Patrimonio sobre el Plan Especial de Portos, en el que figura la remodelación de la plaza de abastos y la reordenación de gran parte de la fachada marítima de la villa del albariño, ha bloqueado por completo uno de los grandes proyectos pendientes que existen en ese municipio. Con el objetivo de desbloquearlo, miembros del cuatripartito se van a sentar mañana en una mesa a cuatro bandas en la que, además del grupo de gobierno de la villa del albariño, van a estar presentes técnicos de Patrimonio, de Portos y de Medio Ambiente.

El objetivo de este encuentro es tratar de desbloquear el proyecto, tal y como reconoce José Ramón Abal, integrante del cuatripartito cambadés, que apunta el hecho de que "fue una auténtica sorpresa que Patrimonio presentase ese informe y bloquease el desarrollo del Plan Especial que diseñó Portos de Galicia". A ello hay que añadir la posibilidad de perder la financiación comprometida por el Ministerio de Fomento para la obra, un respaldo económico que puede esfumarse al encontrarse bloqueada la obra. La intención "es buscar una explicación al demoledor informe presentado por Patrimonio y buscar fórmulas que nos permitan seguir adelante con el proyecto". Entre esas ideas, se encuentra la de conseguir una tramitación simplificada, en lugar de la ordinaria, lo que evitaría un tiempo burocrático muy importante.

Esa petición tiene su fundamento, ya que proyectos similares desarrollados en lugares como Porto Meloxo, Porto do Son o Vilanova de Arousa se agilizaron gracias a la tramitación simplificada.

En ese informe existe una serie de cuestiones en las que el grupo de gobierno y Portos están en desacuerdo, como la necesidad de proteger determinados bienes cuyo valor es, cuanto menos, dudoso. Son edificaciones como el hórreo construido por la Escola Obradoiro hace tan solo una década o un horno de cal de muy escaso interés patrimonial. Pero además, el informe obliga a mantener todo el antiguo inmueble de la plaza de abastos y limita la altura del nuevo edificio, dejándola en bajo y primera planta, una propuesta que se llevaría por delante la posibilidad de destinar esa primera planta a zona de establecimientos comerciales, como se pretende en el Plan Especial, cercenando la posibilidad de convertirla en un importante centro comercial.

Las exigencias planteadas desde Patrimonio llevaron al cuatripartito a insinuar en su día que, tras el informe, existe una intencionalidad política importante".