Tomás Fole, líder de la oposición vilagarciana con el PP, arremete contra el alcalde socialista Alberto Varela, a quien considera "deslegitimado y desautorizado" como consecuencia de las decisiones u omisiones de las que hace responsable al propio regidor.

La plataforma ciudadana por el empleo creada en torno al futuro área comercial de Megasa, lo sucedido con la senda verde del tren, el rechazo a las propuestas de la Autoridad Portuaria para el hotel de O Ramal o el aprovechamiento de la Comandancia y el derribo del viejo centro de interpretación de la playa "para prometer otro" son las pruebas de que el PP necesita para sostener que tras nueve meses el gobierno local "debe reconocer su error y asumir su minoría, empezando por buscar el diálogo social".

Respecto a la parcela de Megasa, en el PP sostiene que "ha tenido que pasar un mes, una revuelta social, la conformación de una plataforma ciudadana por el empleo y una recogida masiva de firmas para que Alberto Varela reconociera públicamente que Alcampo podría implantarse en Vilagarcía".

El PP incluso tiene reproches para la asociación de comerciantes Zona Aberta, pues considera que "es el colmo que su directiva imponga un absurdo veto a trabajadores que quieren abrir sus comercios y que hasta podrían querer adherirse al colectivo", refiriéndose así al hecho de que Ravella "quiere privar a pequeños emprendedores de la ciudad de poder iniciar su actividad empresarial" en el área comercial de As Carolinas.

Abundando en esto, Fole y su equipo tildan de "vergonzoso" que un grupo de vecinos tuviera que constituirse en plataforma "para defender la creación de puestos de trabajo contra 14 de los 21 concejales de la Corporación".

Y los populares concluyen que "la palabra de Varela hace muchos meses que no tiene valor alguno". Pero lo que consideran aún peor es que "sigue sumido en una absurda espiral de búsqueda de enemigos que no existen y que le dejan a la altura del betún, dentro y fuera de las fronteras de su ciudad sin modelo".