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La contaminación vuelve a aflorar y el Náutico suspende sus entrenamientos

El vertido provenía de un aserradero de piedra y había restos de grasas que manaban del colector por la lluvia -El Concello lamenta la falta de personal que sufre el Seprona

El vertido de escabeche y polvo volvió a aflorar ayer en un pequeño afluente del río Umia. // Iñaki Abella

Mientras la Mancomunidade gestiona con Augas de Galicia soluciones para acabar con los vertidos, los problemas en el río Umia no cesan. En la tarde de ayer, en el bombeo de O Piorno de Cabanelas volvió a repetirse la imagen turbia del río por los vertidos de un aserradero de piedra y de una conservera. El Concello de Ribadumia advirtió de manera inmediata al aserradero, identificado como responsable de este vertido en otra ocasión, y achaca los restos de aceites y escabeche al afloramiento de restos que todavía quedaban en el pozo de bombeo de anteriores días, unos restos que han resurgido por causa de las lluvias.

La situación ha colmado la paciencia del Club Náutico O Muiño de Ribadumia, que ayer anunció su intención de dejar de entrenar, en pleno inicio de la temporada, al considerar que "en estas condiciones, y mientras no se ponga freno a los vertidos, resulta imposible seguir con la actividad", explicaban en un comunicado.

La entidad deportiva, una de las más laureadas de Ribadumia ha explotado ante lo que considera una "situación demasiado persistente en el tiempo" y carga contra las administraciones responsables del bombeo, entre ellas, el propio Concello al que pertenece al que insta a buscar una solución inmediata. "Es cierto, como explicaba el edil José Ramón González Lede, que esto es un problema que viene de lejos, pero nunca ha sido tan continuado por lo que es una cuestión a la que debe buscar una solución y no excusarse y echar la culpa a los que ya no están".

El edil de Medio Ambiente y su compañero en el grupo de gobierno Enrique Oubiña, aseguraban ayer que "se ha alertado de la situación a Espina y Delfín, como empresa concesionaria del servicio, y al Seprona de la Guardia Civil para que sus agentes viniesen a levantar acta, pero nos hemos encontrado con que la falta de personal impide que haya servicio por la tarde, algo que resulta incomprensible".

Oubiña y Lede aseguran que el Concello está "pendiente de forma permanente del bombeo y entendemos que la Mancomunidade debe tomar cartas en este asunto de forma inmediata, con penalizaciones a las empresas que se demuestre que han utilizado la red de alcantarillado para verter residuos industriales sin depurar". Los operarios de Espina y Delfín se afanaban en la tarde de ayer para tratar de identificar a la conservera responsable de un residuo que se registra en las inmediaciones de una de las zonas más turísticas de la comarca a las puertas de la Semana Santa.

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