La gerencia del Área Sanitaria Integrada Pontevedra-O Salnés presentó ayer los nuevos espacios para los servicios de urgencias y obstetricia tanto a los jefes y supervisores del Hospital Comarcal como a la junta de personal de área sanitaria. La finalización del edificio contiguo al centro hospitalario está pendiente solo de pequeños detalles y el gerente, José Manuel González, espera que la obra sea entregada al Sergas en los próximos días. Pero el traslado efectivo de los servicios de urgencias y obstetricia deberá esperar unos meses. González Álvarez señaló que esta actuación se realizará antes del próximo verano.

José Manuel González dirigió la visita al nuevo bloque hospitalario acompañado por el gerente del Hospital do Salnés, Bibiano Fernández-Arruti, una de las directivas del área de obstetricia y el representante de la empresa encargada de las obras de ampliación y remodelación del centro hospitalario ubicado en Rubiáns.

El edificio anexo cuenta con un acceso propio por el lateral del centro hospitalario con una explanada exterior cubierta suficientemente amplia para que las ambulancias y los vehículos puedan dejar a los pacientes frente a urgencias protegidos de las inclemencias meteorológicas. Ya en la entrada, el nuevo edificio cuenta con una recepción amplia que deriva las urgencias de pediatría a un bloque diferenciado y las generales a otro.

El área de urgencias pediátricas cuenta con triaje propio, dos consultas, una sala de observación con dos camas, una sala de espera propia, y el bloque es muy luminoso, al contar con grandes ventanales, lo que hará más acogedora la estancia de los niños que tengan que acudir a este servicio. Un color malva decora toda la zona que aún está pendiente de mobiliario. La estadística indica que se atienden una media de veinte urgencias diarias en pediatría.

Al otro lado de la recepción está el bloque para las urgencias generales, contando con dos boxes especiales de suficiente amplitud para la atención de urgencias vitales. Hay zonas de triaje, una amplia sala de espera y diez boxes de muy buen tamaño, que triplican la superficie de los disponibles en el servicio actual y dos están preparados para pacientes que necesiten aislamiento.

También hay una sala para los pacientes atendidos que están recibiendo tratamiento o que se encuentran a la espera del resultado de las pruebas practicadas. El nuevo servicio de urgencias cuenta con dos controles de enfermería; uno para la zona general y otro en el sector de camas de observación; habitaciones de observación para pacientes en aislamiento, así como consultas, sala de yesos y sala de médicos. La superficie total asistencial triplica la del actual servicio.

El edificio está conectado con el principal del hospital mediante tres corredores diferenciados: uno lleva al laboratorio, otro comunica con obstetricia y otro va hacia las consultas.

El área de obstetricia, panelada con un color pistacho, que diferencia el servicio del resto del edificio pasa de los actuales 130 cuadrados a una superficie de 500 metros. Cuenta con dos salas polivalentes de dos camas cada una, y dos salas de parto con sus respectivas bañeras para las mujeres que prefieran dar a luz en un medio acuático. También se instala una sala de reanimación de bebés con dos cunas. El área de obstetricia está comunicada mediante un pasillo con la zona de quirófanos a donde trasladarían a la parturienta en el caso de necesitar una cesárea urgente.

Una vez que el Sergas reciba el nuevo edificio, procederá a las verificaciones y trámites burocráticos pertinentes y a la posterior instalación de los equipamientos y el mobiliario que ya han sido encargados para la puesta en marcha de los servicios de urgencias y obstetricia. Pero antes de que se produzca el traslado efectivo de estas dos áreas, el inmueble tendrá que superar unos controles biológicos obligatorios. José Manuel González espera que todos estos trámites se completen durante la primavera y que el personal de ambos servicios esté trabajando en el nuevo edificio antes del verano.

En cuanto a la plantilla, el gerente del área integrada entiende que podrán necesitar celadores, enfermeras y auxiliares, pero en esta fase no será necesaria la contratación de más médicos, en contra de lo que opinan los delegados sindicales de este colectivo.

Bloque quirúrgico

También está muy avanzado el edificio en el que se instalan los 5 nuevos quirófanos. Además de contar con una mayor amplitud, las salas de operaciones estarán dotadas con los equipamientos más modernos y sistemas de alta tecnología. Todas las canalizaciones irán por paneles colgantes, en tanto que se reserva una de las paredes de cada quirófano para la instalación de pantallas de alta tecnología para consultar todo tipo de pruebas por imagen que estén en la historia del paciente, mientras se realiza la intervención quirúrgica.

Las obras de este bloque están muy avanzadas y pendientes del traslado de urgencias y obstetricia debido a que los actuales espacios serán destinados a servicios complementarios del área de quirófanos. González Álvarez espera que estos trabajos estén finalizados a la vuelta del verano para poder planificar la puesta en servicio del área quirúrgica. A pesar de que la obra más compleja tecnológicamente ya está realizada, los trabajos de adaptación de las zonas complementarias a los quirófanos presentan sus dificultades porque se realizarán dentro del centro hospitalario que mantiene su normal funcionamiento.

En cuanto al personal, al pasar de 3 a 5 quirófanos, será necesaria la contratación de más médicos para cumplir con la ratio establecida. En la tercera y última fase, para la dotación de un hospital de día, también será necesaria la contratación de más personal, incluidos médicos, por que se trata de un servicio de nueva creación. El gerente destacó que hará falta más personal de forma gradual, pero no especificó el número de contrataciones laborales que se realizarán.