En la parroquia de San Vicente los vecinos dicen que hay papeleras que rebosan "desde hace meses, sin que nadie pase a vaciarlas", y en la de San Martiño se habla de contenedores de basura "llenos, sucios y desordenados".
Se pone así en duda el sistema de recogida de residuos del Concello de O Grove y las críticas surgen tanto de la población como de los grupos políticos de la oposición y el sector de la hostelería.
"El servicio de limpieza ha empeorado considerablemente", aseguran algunos de los vecinos, quienes indican la existencia de contenedores "en mal estado, a pesar de que se estrenaron hace poco más de un año". A esto hay que sumar la falta de civismo de algunos ciudadanos que depositan todos los residuos en la calle, aunque algunos sean voluminosos y deban ser trasladados al punto limpio o recogidos por los servicios especializados. Todo ello, sentencian los mecos, "afea la imagen de nuestro pueblo".