La paralización del vial que une Baión con András, en Vilanova de Arousa, ha abierto otra vía de agua entre el Concello y la Diputación, al entender los primeros que el organismo provincial "ignora por completo las necesidades de los vecinos".

El propio regidor, Gonzalo Durán, hace suyo el malestar que existe entre los vecinos de la parroquia por esta situación y señala directamente al organismo que preside Carmela Silva al asegurar que "no sabemos absolutamente nada de lo que ha pasado con este proyecto que es fundamental para la vertebración del interior de este municipio, pero al igual que la ampliación de la casa da cultura de O Esteiro, esta nueva Diputación que nos ha tocado en desgracia toma decisiones sin ningún tipo de sentido y sin comunicarnos nada".

Desde que se adjudicó la obra a la empresa Covsa, por 1,7 millones de euros, el proyecto "sufre cerca de un año de retraso sin que se expliquen los motivos, algo totalmente inaudito entre administraciones, por lo que exigiremos una explicación sobre ello; no puede ser que las dos obras que estaba ejecutando la Diputación en Vilanova se encuentren paralizadas de esta forma, porque el daño que provocan a los vecinos es mucho".

Comparte Durán el malestar de los vecinos ante la situación en la que se encuentra el vial que "a su trazado sinuoso y estrecho suma un gran número de deficiencias en su capa de rodadura que deben ser solucionadas lo antes posible".

Vilanova todavía se encuentra pendiente de que se retomen las obras de construcción de la casa da cultura de O Esteiro, paralizadas desde finales del pasado año por la existencia de una línea de media tensión en las inmediaciones de la obra. Desde la paralización de la obra solo se ha vuelto a actuar en ella para evitar el deterioro de lo construido por los temporales pero, pese a que se prorrogó el convenio entre Diputación y Concello hasta agosto, no ha sido sacada a licitación la obra para finalizar lo que será el futuro auditorio y la sede de la Escola de Música de Vilanova.