La policía trata de dar con el paradero de los jóvenes que recorren Galicia con el señuelo de cambiar los contadores de gas y electricidad en los domicilios y que exigen por anticipado el pago de la pieza.

Esta misma semana han actuado en varios domicilios de Vilagarcía sin que se descarte que hayan ido a otros municipios de la comarca de O Salnés.

Varias son las personas con las que han contactado, especialmente las que pueden resultar más vulnerables como la tercera edad, con déficits de movilidad o escasa visión.

Al menos se conoce un caso en el que los estafadores se han llevado un "botín" de 200 euros, dinero que tenía una mujer en su casa a la que advirtieron que si no entregaba esa cantidad quedaría sin energía eléctrica esa misma noche.

Fuentes del edificio indican que los estafadores han llamado a varias puertas del inmueble con menos resultado pues la mayor parte de los vecinos aseguraron que no tenían efectivo en casa en ese momento. Más desconfiado fue un invidente que tras rechazar la oferta de los supuestos operarios de la compañía de electricidad y ante la insistencia de aquellos en que les abriese la puerta les advirtió con la policía.

La estafa se está llevando a cabo en toda Galicia y de hecho son muchas las denuncias que se han presentado en las distintas comisarías. Los citados individuos son jóvenes, acostumbran a vestir traje y suelen crear confianza en los vecinos pues solicitan el contrato eléctrico anterior para realizar el de la nueva compañía. Una vez dentro del domicilio consuman la acción delictiva.