El expresidente de la Diputación de Pontevedra (y que mañana dejará también la presidencia provincial del PP) sigue dejando atrás etapas de su vida política, y ayer presentó en el Ayuntamiento de Ribadumia su renuncia al acta de concejal del Partido Popular.

La dimisión de Louzán de su cargo como edil ya se daba por hecha desde que en las elecciones municipales de mayo perdió tanto la Diputación de Pontevedra como la Alcaldía de Ribadumia, que hasta entonces había desempeñado su mano derecha en la localidad, Salomé Peña.

Louzán fue a pesar de todo uno de los dos diputados provinciales del PP por O Salnés, aunque cuando se consumó el pacto PSOE-BNG le dejó el acta a Salomé Peña. Y ahora ha consumado su anunciada marcha de la política municipal. En realidad, hace años que Louzán apenas acude ya a los plenos del Ayuntamiento.

En la actualidad, Rafael Louzán es el presidente de la Federación Galega de Fútbol, aunque en las elecciones generales de diciembre pasado también figuraba como suplente en la candidatura conservadora al Senado. El ribadumiense también está implicado actualmente en dos causas judiciales, una de las cuales se instruye en Cambados, por presunto cohecho por alquilar dos bajos.

El PP de Pontevedra apunta en un comunicado que "tras cinco mandatos como concejal electo en Ribadumia (Louzán) entiende que es el momento de dejar paso a nuevas personas". Louzán indica que le está muy agradecido a los vecinos de Ribadumia que confiaron en él, "para poder ejercer distintas responsabilidades en las que siempre antepuso los intereses de la ciudadanía y la mejora del Concello". También agradece la colaboración del personal municipal y de los ediles de todos los partidos.