La preocupación en el Servicio Municipal de Emergencias y Protección Civil de Vilagarcía de Arousa por la situación en que se encuentra la isla de Cortegada, que forma parte del Parque Nacional Illas Atlánticas, ha llevado a la agrupación a ingeniar una bomba de agua flotante para luchar contra eventuales incendios forestales. El nuevo equipo, de fácil transporte, puede colocarse en el mar desde donde se bombea agua para apagar fuegos.
El responsable municipal de Emergencias de Vilagarcía, Francisco Javier Guillán Busto, confirmó que este servicio no ha recibido ningún equipo de refuerzo por parte de la administración autonómica para la lucha contra posibles fuegos en la isla de Cortegada, en contra de lo que había sido anunciado por parte de la Consellería de Medio Ambiente, tras el incendio forestal declarado en la isla en el mes de julio.
La colaboración de los vecinos de Carril, que actuaron de inmediato cuando vieron las primeras llamas en la isla y trasladaron a los efectivos contra incendios en sus embarcaciones, fue clave en la extinción del fuego. El siniestro finalmente se convirtió en un conato de incendio que hizo saltar las alarmas sobre la falta de medios ante un caso de emergencia en este territorio insular.
Cortegada tiene una gran vegetación, incluido un bosque de laureles único en Europa por sus características. Anteriormente los vecinos de Carril podían acudir a la isla para recoger piñas para las casas y la pequeña vegetación que crece entre los árboles para los animales. De esta forma se mantenía la limpieza de la zona boscosa. Pero esta posibilidad quedó erradicada al incorporarse Cortegada en el Parque Nacional Illas Atlánticas de Galicia. Las normas de estos parques impiden este tipo de actuaciones y hasta para acceder a la isla hay que pedir permiso a la dirección del Parque.
En la época estival el Parque Illas Atlánticas promueve una acción de voluntariado en la que grupos de jóvenes dirigidos por el personal del Parque contribuyen al mantenimiento de Cortegada, pero el crecimiento de la vegetación convierte esta labor en insuficiente.
Tras unos meses de fuertes lluvias, cuando empiece el calor, la vegetación crecerá con gran fuerza, por lo que el Servicio de Emergencias de Vilagarcía teme una época estival conflictiva en materia de incendios forestales.
Para luchar contra el fuego con los medios que tienen a su disposición, el equipo que dirige Guillán Busto ha trabajado en la preparación de un nuevo camión de Emergencias, carrozado a la medida de las necesidades del personal, y también preparó una bomba de agua flotante para utilizar en caso de urgencia en la isla de Cortegada.
Los miembros de Protección Civil compraron de segunda mano la bomba, que adaptaron para que cumpla la función de bombear agua desde el mar sin problemas. El equipo flotante ya está finalizado y ayer los efectivos de la agrupación le daban los últimos retoques. Su intención era ponerla a prueba en una zona del monte vilagarciano con pozo para confirmar que responde a los objetivos para los que se creó.
El Servicio Municipal de Emergencias dispone de una nueva embarcación para actuaciones de salvamento en el mar que pondrá en marcha a partir del próximo mes, durante el desarrollo de unos ejercicios prácticos para voluntarios de Protección Civil.
Los nuevos equipamientos fueron presentados oficialmente ayer por el responsable del servicio, Guillán Busto, al alcalde de Vilagarcía, Alberto Varela y al concejal delegado de Policía Local y Emergencias, Juan Antonio Pérez Callón durante una visita que ambos realizaron a la sede de la agrupación ubicada en los bajos del edificio municipal multiusos de la calle Agustín Romero.
