La presidenta de la Diputación, Carmela Silva, inauguró ayer el vivero de empresas del polígono industrial de Barro-Meis, un espacio de casi 2.000 metros cuadrados que acogerá a dieciséis emprendedores de la provincia.

A través de este espacio se pondrán a disposición de estos proyectos empresariales para "convertir en realidad" las iniciativas de los emprendedores pontevedreses, de forma que contribuyan a la "generación de riqueza" en la provincia y a la creación de puestos de trabajo.

Este vivero de empresas está dotado, aseguró Silva, de "todos los servicios" que estos proyectos necesitan para "facilitar su implantación".

Son, en total, 1.369 metros cuadrados útiles en 16 naves, 16 oficinas de 18 metros cuadrados, ocho oficinas de 25 metros cuadrados, cuatro salas de juntas y tres espacios de coworking con una capacidad para doce puestos de trabajo.

El primer proyecto que utilizará los servicios de este vivero empresarial, por espacio de un año, es la compañía Eurotec Inspección S.L., que firmó ayer el contrato de cesión del espacio.

Carmela Silva ha querido reconocer el "esfuerzo" del anterior gobierno provincial para impulsar este proyecto y ha destacado el "compromiso" del nuevo ejecutivo para convertirlo en un "referente" del análisis y formación de "nuevos nichos de actividad" para promover el crecimiento económico y la generación de empleo.

La presidenta provincial recordó que la institución destina este año un 20,5% más de recursos al fomento del empleo, invirtiendo 15,3 millones de euros "en planificar estrategias de desarrollo con la finalidad de fomentar el crecimiento económico y el progreso social de la provincia".

El acto de inauguración ha concluido con la celebración de unas jornadas sobre emprendimiento, la Startup Europe Week, impulsada por la Comisión Europea para el fomento de la creación de nuevas empresas. La Diputación trabaja en el desarrollo de una nueva línea específica de apoyo a emprendedores, a mayores de otras actuaciones como el impulso del coworking.