La corporación municipal de Cambados aprobó anoche el primer presupuesto de un gobierno de izquierdas en 28 años. Lo hizo con los 9 votos a favor de los concejales de PSOE, BNG, Somos Cambados y Cambados Pode, que integran el cuatripartito, y los 8 votos en contra del Partido Popular.

Las cuentas ascienden a 9,4 millones de euros, lo que supone un 9 por ciento más que las cuentas de 2015, cuando habían ascendido a 8,5 millones. El documento, elaborado por el concejal de Economía e Facenda, Xurxo Charlín, contempla un aumento de algo más de 30.000 euros en las partidas de servicios sociales, enfocando la subida en los capítulos de ayuda en el hogar y emergencia social.

En cuanto a inversiones, algunas de las más destacadas son el soterramiento del cableado eléctrico de la Rúa Real -una de las adyacentes a la plaza de Fefiñáns- por valor de 110.000 euros. También se contemplan las obras de construcción de aceras y la mejora del asfaltado en Burgáns (116.000 euros), así como actuaciones en las pistas de atletismo y tenis por valor de 40.000 euros. También se han reservado casi 220.000 euros para la aportación municipal de la reforma de la plaza de abastos.

El portavoz del PP, Luis Aragunde, considera que algunas de las previsiones se quedan muy cojas, y que en cambio el cuatripartito ha inflado los gastos de personal. "Tenéis más personal y gastáis más que nosotros". A modo de ejemplo, afirmó que los agentes de la Policía Local se están viendo obligados a realizar una gran cantidad de horas extras para cubrir el puesto de un guardia que ahora realiza labores de administrativo.

En la sesión se sometieron también a votación una propuesta de acuerdo del grupo de gobierno en contra del proyecto de azud o represa que pretende hacer la inmobiliaria de A Toxa en el río Umia por indicaciones de Augas de Galicia. En este caso sí hubo unanimidad de la corporación en contra del proyecto, y se insta a la empresa a utilizar la red pública de suministro del Ayuntamiento de O Grove.

Otro de los asuntos de la orden del día fue una moción del Partido Popular, instando al Concello a que se dirija a la Diputación pidiendo la puesta en marcha inmediata del parque provincial de maquinaria. En este punto hubo un agrio debate entre Luis Aragunde, y la alcaldesa, la socialista Fátima Abal.

Aragunde afirmó que la Diputación ha tenido completamente parados más de 60 máquinas y vehículos durante meses, a pesar del mal estado de varias carreteras provinciales, algunas de ellas seriamente afectadas por las inundaciones de este año. "Esta es la nueva política de la Diputación, tirar el dinero", espetó el portavoz conservador.