El gobierno de Vilagarcía ha encontrado la fórmula legal y jurídica para impedir la construcción de un centro comercial en la parcela de Megasa. Así, los socialistas elevan al pleno de hoy una moción de urgencia en la que proponen la "suspensión potestativa" de todo tipo de licencias (parcelación de terrenos, edificación y demolición) durante un año para nuevas áreas comerciales en todo el término municipal. Para que este veto pueda entrar en vigor es necesario un acuerdo plenario por mayoría absoluta -once escaños-, sin posibilidad de utilizar el voto de calidad del alcalde para un posible desempate. El grupo de gobierno contará en la sesión de esta tarde con un concejal menos, por lo que dispondrá de siete.

La propuesta que ayer dio a conocer Alberto Varela en rueda de prensa está avalada por informes de la secretaria municipal, del arquitecto del Concello, del equipo redactor del PXOM (de Eptisa) y de la exgerente de Urbanismo.

La suspensión de licencias comenzará a aplicarse cuando el acuerdo plenario se publique en el DOG. Si durante el año en vigor el equipo de Varela logra aprobar de forma inicial el nuevo Plan Xeral -ahora en revisión-, el veto a nuevos centros comerciales en Vilagarcía se mantendrá durante dos años más, hasta la aprobación definitiva del PXOM. En caso contrario, la suspensión se extinguirá.

La suspensión afectará a las licencias que se soliciten desde la publicación del acuerdo en el DOG y a los expedientes en tramitación, pero en ningún caso a los ya resueltos ni a los permisos otorgados expresamente o por silencio administrativo.

En el caso de Megasa, la propiedad presentó en Ravella una solicitud de licencia de obra para construir el hipermercado con tiendas. Según el informe de la secretaria, "está pendiente de informe técnico y jurídico". No obstante, el alcalde ya aclaró ayer que a este centro comercial "sí le afecta la suspensión de licencias", puesto que todavía no cuenta con permiso municipal, sino solo con el autonómico, necesario para superficies comerciales de más de 2.500 metros cuadrados.

Aunque en noviembre de 2015 el pleno aprobó una moción de Esquerda Unida para "llevar a cabo la suspensión de licencias para cualquier obra que supere los 2.500 metros cuadrados de uso comercial en zona urbana", el Concello descarta fijar unas dimensiones para vetar nuevos centros comerciales, pues tras "un trabajo muy intenso, con muchas correcciones y reuniones", el Ayuntamiento comprobó que Cataluña lo intentó y que la legislación europea tumbó su pretensión.

Además, el alcalde agrega que el veto a implantar actividades comerciales con más de 2.500 m2 en el municipio afectaría, por ejemplo, a nuevos concesionarios de ventas de coches, determinados supermercados o tiendas de grandes dimensiones, cuando no es este el objetivo del ejecutivo socialista.

Así las cosas, en Vilagarcía quedarán prohibidos -si el pleno así lo decide- "los establecimientos integrados por un conjunto de actividades comerciales individuales", es decir, los tipo "mall".

Por tanto la construcción de un hipermercado estaría permitida ("no tenemos manera de limitarlo", dice Varela), así como la de un único establecimiento comercial de grandes dimensiones. Sin embargo la de un híper con otros negocios adyacentes no, que es el caso de Megasa. "Estamos luchando contra el modelo del centro comercial, un modelo agotado que no es efectivo y al que tratamos de ponerle coto. En Europa está en retroceso. Queremos evitar que esos espacios se conviertan en plazas públicas", expresó el alcalde, quien dejó claro que la suspensión de licencias no afecta al centro comercial que ya funciona en Vilagarcía.

El regidor hizo un llamamiento a la calma ante lo que él mismo calificó como "una medida de impacto", la cual cuenta con "una seguridad jurídica y técnica": "Que nadie se alarme porque no impediremos que las empresas se instalen en Vilagarcía ni tampoco la creación de puestos de trabajo. Lo que sí tratamos de impedir es que la creación de esos empleos sea para destruir otros".

Varela asegura que esta suspensión de licencias "concuerda con lo que recogerá el nuevo PXOM", el cual prohibirá nuevos centros comerciales. El primer edil prevé que la aprobación inicial de la hoja de ruta urbanística de la ciudad se produzca "en pocos meses".

El Plan Xeral ahora en vigor (del año 2000) contempla dos categorías de uso comercial, mientras que el nuevo prevé cuatro: local comercial en edificio de uso principal distinto al comercial y de servicios; establecimiento comercial en edificio de uso exclusivo; galerías comerciales; y superficie o área comercial.

En cuanto a la influencia del nuevo planeamiento en el hipermercado de Megasa, la secretaria municipal apunta que "otorga las mismas condiciones urbanísticas que a las de su entorno, por lo que no se produce una minoración de las posibilidades edificatorias de los terrenos, que siguen conservando el uso comercial, o dicho de otro modo, no se deriva de esta propuesta un daño real y efectivo evaluable económicamente, a excepción de la indemnización que pudiera derivarse, en su caso, de la aplicación del artículo 77 de la LOUGA (coste oficial del proyecto y evolución de los tributos municipales) de darse los requisitos para su aplicación".