Las cofradías de pescadores contrarias al anteproyecto de la Lei de Acuicultura de Galicia propuesta por la Consellería do Mar calientan motores para la gran manifestación que esperan organizar el día 27 en Santiago.

Lo hacen mediante la organización de todo tipo de charlas y asambleas informativas como las que va a celebrarse durante el fin de semana en A Illa -viernes o domingo- para tratar de movilizar al mayor número de ciudadanos posible en cada puerto.

Al mismo tiempo los pósitos recogen firmas para exigir la anulación y retirada total del articulado propuesto, ya que como se explicó en anteriores ocasiones no les sirve el anuncio realizado por el presidente de la Xunta en el sentido de paralizar este anteproyecto hasta que sea consensuado con el propio sector.

Otro frente de actuación abierto es el de la contratación de autobuses para trasladar a todos los ciudadanos interesados en desplazarse a la capital gallega. Y esto lleva pareja la negociación con los diferentes gobiernos locales para buscar financiación.

En todos los casos tratan de hacer partícipes de la protesta no solo a los pescadores, mariscadores y bateeiros, sino también a los trabajadores de la industria conservera, los astilleros, cordelerías, pescaderías y negocios similares. Independientemente de ello se anima al conjunto de la sociedad "en defensa del sector del mar".