El concejal de Medio Ambiente de Vilagarcía de Arousa, Lino Mouriño, confirmó que el Concello ha vuelto a presentar candidatura para poder ondear nuevamente las banderas azules en las playas de O Preguntorio, en Vilaxoán, y de O Campanario, en Bamio, donde se mantiene la excelencia de la calidad de las aguas, además de contar con los servicios complementarios exigidos para lucir esta distinción.
De este modo, Vilagarcía repite candidaturas a las banderas azules en materia de playas, pero debe renunciar al galardón que ostentaba el Centro de Interpretación de la Ría de Arousa, CIRA. Esta instalación estaba ubicada en el edificio del acuario de la playa de Compostela y tuvo que ser desmantelada debido a que el servicio estatal de Costas ordenó la demolición del local que había quedado fuera de ordenación.
Todo el material del CIRA ha sido almacenado por el Concello de Vilagarcía en locales municipales a la espera de volver a contar con un espacio adecuado para recuperar el área expositiva. El alcalde, Alberto Varela, recientemente se mostró partidario de dotar de más contenido a este centro de interpretación para que resulte atractivo tanto a los vilagarcianos como a los turistas.
En cuanto a las playas, la de O Campanario, en la parroquia de Bamio, no ha sufrido cambios y se mantienen todas las características que han merecido la concesión de la bandera azul.
El arenal de O Preguntoiro, en Vilaxoán, ha sido objeto de obras de mejora ya que Costas aportó más de 6.500 metros cúbicos de arena con destino a su ampliación, tal como habían solicitado los miembros de la asociación de vecinos. Esta será una de las mejoras, aunque el gobierno municipal aspira a lograr un convenio con Portos de Galicia para remodelar la explanada ubicada frente a la playa, que redundará en beneficio de los usuarios de la playa.
En cuanto a las playas de A Concha-Compostela, el edil Lino Mouriño, reconoció que deberán transcurrir varios años antes de poder solicitar la bandera azul, debido a los episodios de vertidos que sufrieron sus aguas en los últimos años. El gobierno municipal socialista apuesta por la eliminación de los vertidos como una de las primeras actuaciones en esta zona.
