Un voluntario de Protección Civil de Cambados localizó a media mañana de ayer la culebra que el jueves por la tarde habían visto unos padres de alumnos escondida entre unas hojas, junto a los juegos del patio del colegio de Vilariño. El autor del hallazgo, Iván Marín, sostiene que era un ejemplar de unos 60 centímetros de longitud, autóctona, y tras su localización pidió instrucciones a la Guardia Civil sobre que hacer con ella. En el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) le indicaron que la soltase en el monte, y Marín la trasladó hasta el entorno de la concentración parcelaria de Oubiña.

La culebra fue localizada el jueves por la tarde por unos padres que habían acudido con su hijo al patio del centro. En las proximidades de los columpios había bastantes hojas, y un miembro de la pareja las removió inconscientemente. Fue entonces cuando vieron el ofidio, oculto entre la hojarasca.

Los padres le hicieron una fotografía con un teléfono y abandonaron la zona para dar parte del hallazgo. El director del colegio decidió entonces restringir el acceso al patio hasta que apareciese la serpiente o se estuviese seguro de que ya se había ido.

Así, a primera hora de la mañana de ayer se presentaron en el centro unos operarios del Ayuntamiento, que se encargaron de limpiar el patio y recoger las hojas, y sobre las 11 de la mañana hizo su aparición el voluntario de Protección Civil. Éste inició la búsqueda en compañía del director del colegio por la zona donde el día anterior habían visto el reptil los padres, y en apenas cinco minutos lo localizaron.

Según Marín, se trata de una especie que habitualmente está hibernando a estas alturas del año, de ahí que sea raro verlas en invierno. Lo que hizo fue cogerla con un palo, y posteriormente la introdujo en una caja. Fue entonces cuando llamó al Seprona para que le diesen instrucciones, y cuando le pidieron que la dejase en libertad.

Se da la circunstancia de que junto al colegio Enrique Barreiro hay una zona boscosa, pero se descartó dejar la serpiente en ella por temor a que regresase al patio. De ahí que se llevase más lejos.

Además, antes de suspender el operativo se dio otra batida al patio para descartar que hubiese más culebras escondidas.

Una vez que los operarios municipales terminaron la limpieza, el director explicó a los padres que el lunes los niños podrán volver a utilizar el patio con normalidad. Ayer no fue posible no solo por la búsqueda de la serpiente, sino también por la lluvia. Los padres piden al Ayuntamiento que las limpiezas en el patio sean más frecuentes.