La historia se repite y casi todos los inviernos se escribe del mismo modo en aguas de Carril. Situados en la desembocadura del Ulla, los parques de cultivo de esta importante zona productora vilagarciana sufren como pocos lugares el aumento del agua dulce, o lo que es lo mismo, la reducción de la salinidad. Y claro, después del lluvioso comienzo de año los titulares de estas concesiones acuícolas vuelven a poner el grito en el cielo para denunciar "importantes mortandades" de producto y reclamar la adopción de medidas que traten de corregir la situación.

Tras haber aprovechado para colocar su producto, y parece que de forma muy satisfactoria, gracias al fuerte tirón de las fiestas navideñas, los parquistas hablan de nuevo de los daños causados por el incremento del caudal del Ulla.

"Todo el mundo sabe que el agua dulce produce un inmenso daño en nuestros viveros, y todos vemos cómo las inundaciones se producen porque esa agua no puede evacuarse como sería deseable, ya sea porque el cauce del río está obstruido o porque su caudal sube de forma demasiado repentina, y más aún cuando abren las compuertas del embalse", explica uno de los parquistas carrilexos.

En este colectivo considera que en Carril se conjugan ambos factores y destacan que "cuando abren el embalse el caudal de agua dulce sube en el fondo de la ría de forma súbita, y claro, como el cauce del río tiene poco desagüe se acumula sobre nuestros viveros".

Estos acuicultores recuerdan que "antes había un canal que en bajamar tenía sobre 1,5 metros de profundidad, pero ahora ya no existe y todo queda en seco cuando baja la marea, por lo que el agua del río también sale con más dificultad y la tasa de salinidad se recupera más lentamente", o lo que es lo mismo, "la acumulación de agua dulce se produce más fácilmente".

Es así como "tenemos que sufrir riadas casi todos los años", lamentan los parquistas. Por eso proponen que se limpie el río para facilitar así el desagüe del agua dulce. Algunos incluso creen conveniente "retirar el exceso de sedimento cuando sube el mar para que los lodos suban río arriba y decanten en donde no hagan daño a nuestros parques", a lo que añaden que en bancos marisqueros como Os Lombos do Ulla hay que actuar sobre la arena, retirando una buena cantidad "para hacer un criadero natural donde sea preciso" o incluso "para usarla como pago de los trabajos a realizar", ya que "al sacar el exceso de arena aumentaría la superficie productiva".