Vecinos y comuneros reclaman las fincas que les fueron temporalmente ocupadas para ejecutar las obras del Eje Atlántico para el Tren de Alta Velocidad (TAV). Se cree que hay cientos de casos en todo el trayecto, y al menos son decenas los localizados entre Vilagarcía y Catoira, sobre todo en este último municipio.

Es precisamente en el Ayuntamiento vikingo donde se escuchan las mayores quejas. Muchos ciudadanos han puesto el asunto en manos de abogados, pues quieren recuperar cuanto antes sus propiedades y, sobre todo, buscan el modo de que se las devuelvan en el mejor estado posible, lo cual parece prácticamente inviable en algunos de los terrenos, a juzgar por el estado en que se encuentran.

Es cierto que ya se han devuelto muchas fincas y que otras han sido inmediatamente ocupadas por sus propietarios una vez terminada la obra y desaparecida la maquinaria pesada.

En situación precaria

Pero también es verdad que hay casos en los que "nada se sabe" de los expedientes y otros en los que "se han devuelto parcelas sin dejarlas como se encontraban en su estado original, y por tanto llenas de escombros de obra donde antes había viñedos y huertos", asegura uno de los abogados que participan en el proceso de reclamación.

El mismo letrado aclara que "en algunas fincas ocupadas rebajaron tanto la cota del terreno que ahora las propiedades se encuentran prácticamente a nivel del río y se inundan cada vez que sube la marea".

Y no son los únicos problemas detectados, ni mucho menos, pues "se están realizando mediciones para devolver fincas en base a un Catastro que es un absoluto desastre, y esto hace que en algunos casos se produzcan importantes diferencias que perjudican tanto a vecinos como a comuneros", insisten los representantes legales de los damnificados.

Hay que tener presente, además, que las primeras expropiaciones u ocupaciones de terrenos se realizaron en el año 2009.

"Venció el plazo"

Pero fue preciso recurrir a una segunda oleada para ampliar el periodo de utilización de terrenos, en 2012, y según los abogados de los expropiados "ya ha vencido el plazo legal marcado para devolver las tierras y aún no se hizo".

Esas últimas, las parcelas ocupadas en 2012, o aquellas que lo habían sido en 2009 pero vieron ampliado el periodo de ocupación a causa del retraso en la obra, parecen ser las más perjudicadas por la tardanza en la devolución de las propiedades.

Muchas de ellas se sitúan justo debajo del viaducto interprovincial que une las localidades de Catoira con Rianxo sobre el río Ulla.

Cabe puntualizar que si bien dicho puente se sitúa sobre el cauce fluvial, una parte importante de sus aproximadamente 1.700 metros de longitud sobrevuela tierra firme, tanto en la orilla catoirense como en la rianxeira, y es ahí donde se ocuparon fincas para levantar pilares y ejecutar el conjunto de la estructura.

En relación con todo esto, los abogados de los afectados denuncian también que "cuando se amplió el plazo de ocupación en 2012 ofrecieron a los propietarios de los terrenos menos de la décima parte de lo que habían ofrecido por las mismas parcelas en 2009, lo cual carece de sentido y resulta injusto".