El principal impuesto de gestión municipal, el IBI, previsiblemente reportará a las arcas de Vilagarcía en 2016 un total de 6.326.378,82 euros, frente a los 6.232.000 euros de 2015 (evidentemente toda esta cantidad no llega a cobrarse debido a la morosidad). Esto significa que pese a la bajada del tipo impositivo del IBI del 0,60 al 0,58 aprobado esta misma semana por los grupos municipales del PSOE y del BNG, la recaudación será mayor. ¿Por qué? Desde Ravella achacan esta subida de 93.500 euros a la subida gradual del catastro (debido a la polémica revisión que aumentó los valores de las propiedades) y a las nuevas incorporaciones al padrón de la contribución, que palían el descenso de los ingresos que supondría mantener el tipo en 0,60.
Por tanto se entiende que la reducción del tipo impositivo en dos puntos no rebajará el importe de los recibos de los contribuyentes, aunque sí minimizará la subida que acarrea la contestada revisión catastral.
En cuanto al IBI rústico, Varela incrementa el tipo impositivo de 0,30 a 0,70, lo que acarreará unos mayores ingresos a las arcas del Concello. Así, el Presupuesto de 2016 recoge que por la denominada "rústica" los contribuyentes desembolsarán un total de 151.186,35 euros, el triple que la previsión de 2014: 58.660 euros (y 23.213 pagados).
