La promoción internacional de Vilagarcía vivirá en los próximos días un espaldarazo de importantes dimensiones. La televisión pública de Suiza ha encontrado en Arousa la excusa perfecta para dar contenido a un programa que verá la luz en febrero. La concordancia nominal con una localidad situada en los Alpes helvéticos y que se llama Arosa ha servido de marco perfecto para encauzar una producción que tiene en el intercambio de habitantes su razón de ser.
Una vez la idea se puso en marcha se inició el proceso de selección de las parejas que cambiarían su lugar de residencia, hábitos y costumbres durante unos días. La empresa Chantre Publicidad fue la encargada de realizar el proceso del casting en nuestra comarca. Entre más de quince parejas interesadas solo cuatro accedieron a la final. Tras grabar una serie de entrevistas fueron los ejecutivos de la televisión suiza los que eligieron a Manuel Álvarez y Marga Bandera, dos profesores vilagarcianos enamorados de la navegación y el deporte, que accedieron encantados a participar en esta aventura como embajada arousana.
VER GALERÍA | Las horas de grabación no impiden gozar de los esquís.
Daniel y Maya fueron los seleccionados como arosanos de pro quienes, acompañados por su hija Jéssica, llevan desde el pasado sábado en Vilagarcía siendo partícipes de la grabación en diferentes localizaciones relacionadas con el estilo de vida de sus homólogos arousanos. La navegación ha sido uno de los ejes principales de la recopilación de los audiovisuales. Para ello incluso se ha contado con la participación de todo un campeón olímpico como Antón Paz y de Bruno Gago, director del Centro Galego de Vela.
La afición por las regatas de Manuel y Marga les ha llevado a conocer diferentes lugares que no solo han causado la admiración de la familia suiza, sino también de todo el equipo técnico que les acompaña. Roberto Lucenti, director del programa, reconoció que ya llevaba más del doble de horas de grabación necesarias para el programa. Su admiración por la riqueza natural de Cortegada y Carril le llevó a afirmar que le planteará a la televisión suiza la posibilidad de volver a producir un documental sobre la zona.
Además de ocupar la vivienda familiar de sus anfitriones vilagarcianos, Daniel y Maya también tuvieron que velar por el perfecto funcionamiento de Alvamar, una empresa que regenta Manuel y que se encarga de realizar diversas excursiones marítimas por la ría de Arousa, entre ellas la que realiza un drakkar por la desembocadura del río Ulla. No dudó la familia suiza en ataviarse para la ocasión como vikingos de excepción para amenizar el viaje de muchos turistas.
Tampoco faltaron citas gastronómicas ni paseos por el casco urbano. Todo ello en una sucesión de sorpresas que terminarán mañana miércoles con la vuelta a su rutina en Suiza. Manuel y Marga también emprenderán el regreso.
