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Los continuos retrasos de las ayudas públicas lastran las reformas en los cascos históricos

La rehabilitación de viviendas no es ajena a la crisis inmobiliaria. En 2013, sin ir más lejos, solo diez de la veintena de proyectos aprobados por la oficina del ARI (Área de Rehabilitación Integrada) de Vilagarcía de Arousa para reformar edificios en los cascos históricos del municipio pudieron ejecutarse.

El resto se quedaron en el tintero por los problemas económicos de los vecinos que preveían actuar sobre sus propiedades. Y en 2014 la situación para las rehabilitaciones no mejoró, puesto que apenas se pudieron tramitar obras.

No obstante, el motivo fue otro. Y es que al menos hasta octubre de 2014, la oficina del ARI no pudo elaborar ni dar salida a ningún proyecto privado de reformas en viviendas ante la incertidumbre de los propietarios sobre las ayudas públicas que dispondrían para la obra.

A dos meses de cerrar el ejercicio, la Xunta todavía no había publicado su plan de rehabilitaciones. Y en 2015 ha ocurrido algo similar, pues las ayudas se conocieron en noviembre.

El día 10 de ese mes el Ayuntamiento de Vilagarcía de Arousa abrió el plazo para la presentación de solicitudes de las subvenciones.

Los interesados disponen de dos meses desde esa fecha para tramitar la petición de las ayudas de rehabilitación en la oficina del ARI, ubicada en Fexdega.

Ante esta nueva convocatoria tardía, los técnicos municipales no disponen de tiempo para poder elaborar proyectos para este año.

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