El vertedero situado al lado de la estación depuradora de Pontecesures va en aumento; al igual que las críticas hacia su existencia. No son nuevas, y de hecho ya las formuló en varias ocasiones durante los últimos años el exconcejal Luis Sabariz. Pero de un tiempo a esta parte esa preocupación vecinal parece haber arreciado, y todo porque se aprecia la presencia de restos de poda y ve viejos asfaltados, escombros de obra y todo tipo de elementos que se acumulan formando una "montaña" de porquería que afea la imagen del entorno.

Este "vertedero incontrolado", explica el exconcejal, "genera un efecto llamada, de tal manera que va en aumento la basura depositada por particulares". A su juicio, "es lamentable que suceda esto a orillas del Ulla, en la Red Natura 2000, pero más preocupante es ver cómo se queman a diario los residuos de poda, provocando humaredas que afectan a los vecinos del Pozo de Cornelia, por lo que sería aconsejable trasladar todo este material a un punto limpio o ponerlo en manos de un gestor autorizado, en lugar de dar esta lamentable imagen, con el propio Concello incumpliendo la normativa medioambiental".