La puesta en valor del Castro Alobre, que junto con el de Vigo es uno de los únicos ejemplos de castros urbanos en Galicia, implica el desarrollo de tres proyectos que financian tres administraciones: Diputación, Estado y Concello de Vilagarcía, con una inversión global que superará los 700.000 euros. Las actuaciones fueron presentadas ayer por el alcalde, Alberto Varela Paz, y la concejala de Urbanismo Paola María Mochales.
El primero de los proyectos se pondrá en marcha en el plazo de diez días aproximadamente, ya que la intención del gobierno municipal es que se ejecute paralelamente a las obras de humanización de la calle Vista Alegre. Se trata de la rehabilitación del acceso al Castro Alobre por la entrada que está junto al colegio filipense en la calle que ahora se está reformando.
La primera parte de este acceso es una escalera de madera que se encuentra en muy mal estado; continúan otras de piedra que están en situación peligrosa, por lo que el Concello de Vilagarcía plantea su sustitución. La escalera de madera será sustituida por otra de acero cortén (un tipo de acero que hace que su oxidación tenga unas características particulares que protegen la pieza frente a la corrosión sin perder prácticamente sus características). La actuación continuará con una pasarela de hormigón con acabado envejecido para mantener la proximidad al entorno. La rampa lateral de Vista Alegre que une con este camino también será igual.
En este proyecto, que ya cuenta con el visto bueno de Patrimonio, se invertirán 62.000 euros que proceden de sobrantes de obras anteriores financiadas por la Diputación.
Excavación y musealización
El segundo proyecto, con una inversión próxima a los 500.000 euros que se financian por parte de la Diputación de Pontevedra, el Gobierno Central y el Concello (este último con una aportación inferior al 5% del presupuesto), establece una primera parte para continuar las excavaciones arqueológicas del Castro Alobre.
La zona elegida por los arqueólogos está junto a la anterior prospección arqueológica y ya está acotada porque los trabajos comenzarán en el mes de enero.
Se estima que los arqueólogos estarán cuatro meses trabajando en este castro. Paralelamente se llevarán a cabo visitas didácticas para que la ciudadanía y los escolares vilagarcianos se involucren con el patrimonio histórico vilagarciano.
La última fase de este segundo proyecto será la musealización, que será financiada por la Administración del Estado.
Aunque de momento no se conocen los detalles de esta segunda parte del proyecto, la intención de la concejala de Urbanismo es la creación de un museo en Vilagarcía que reúna todas las piezas halladas en el Castro Alobre. El alcalde señaló que en el Museo de Pontevedra están depositadas actualmente 14 cajas con cerámicas procedentes del castro vilagarciano. Su objetivo es recuperarlas y sumarlas a las piezas que se encuentren en la nueva excavación.
El tercer proyecto se ejecutará el próximo año y consistirá en la inversión de los 240.000 euros que el gobierno anterior del PP había destinado a la instalación de juegos infantiles en el parque de O Castriño.
La partida presupuestaria, para la que ya se ha solicitado el cambio a la Diputación, será destinada por el actual gobierno a la mejora y reparación de todos los elementos del parque botánico de O Castriño, junto al Castro Alobre, ya que su estanque filtra agua y está en mal estado y las escaleras tienen peldaños hundidos. La propuesta es también sustituirlas por otras en acero cortén.
