Afrontar con entereza el cáncer es una lección que Javier Bruquetas plasma en sus reflexiones. Dicen que su enorme condición humana queda sellada en todas aquellas personas que comparten y han compartido con él. Propone la expresión artística como herramienta para medirse con valentía a la enfermedad.

-Todo su arte puesto a beneficio de una causa que desborda humanidad.

-El mérito es de Patricia y de Paco. Se lo han currado ellos porque yo no estoy en condiciones. Todo ha sido iniciativa suya. Ellos lo han ideado, trabajado y todo el mérito les corresponde.

-Nadie mejor que usted para concienciar a la gente para participar en esta noble causa.

-Como afectado directo de lo que es un cáncer puedo hablar con conocimiento de causa. Pero esto es para animar a cualquier persona a ayudar porque todo el mundo necesita la ayuda de alguien en un momento dado.

-¿Lleva usted mucho tiempo dedicado a su afición?

-No, la verdad. Empecé hace unos diez años porque me enseñó mi hija. Ella estudiaba Bellas Artes me dio unas nociones y ya seguí yo solo.

-¿Se atreve a definir su estilo enfrente de un lienzo?

-No me atrevo. Yo realmente no soy un gran pintor. Utilizo muchas trampas, muchos recursos y pinto lo que me gusta. No tengo formación, pero sé que me gusta pintar acuarela. Aprendí yo solo y es algo que me realiza personalmente.

-¿Si de usted dependiese el apoyo y la gestión del tratamiento a personas hopitalizadas por el cáncer qué medida tomaría de manera inmediata?

- Hay una cosa muy importante en las personas que padecemos cáncer y es que uno de los potenciales más fuertes que tenemos para nuestra curación es nuestro estado de ánimo. Haría algo en ese sentido. El apoyo psicológico es fundamental para afrontar la enfermedad. Y también las familias lo necesitan.

-¿Y qué se le ocurre al respecto?

- Trabajar para que todos los enfermos tengan la oportunidad de expresar sus emociones y sus capacidades a través de cualquier expresión artística. Ya sea pintura, música, el arte. Todo esto es un recurso fantástico para los enfermos y para su estado de ánimo.