El pasado fin de semana O Grove estuvo abarrotado de visitantes, como se explicó en su momento. El tiempo no acompañó, y sin días de playa había que buscar otras alternativas, por lo que espacios tan populares como el paseo Pedras Negras-Con Negro, A Toxa, Siradella y tantos otros estuvieron repletos de gente. Pero entre los nombres de siempre sobresalió el de Punta Moreiras-Monte da Serpe, donde es posible disfrutar de una red de senderos que parece haberse convertido en uno de los espacios preferidos para grovenses y visitantes.
Tanto es así que cientos de personas, puede que miles, atravesaron de un lado a otro de la ensenada de Moreiras gracias a la pasarela colocada hace unos meses, precisamente para dar continuidad a los senderos de ambas orillas.
Llamó poderosamente la atención la presencia de tantos caminantes descubriendo por primera vez este entorno, ya que hasta la colocación del puente era muy complicado acceder a Monte da Serpe.
Tal circunstancia no pasó desapercibida a la presidenta de Hostelería de O Grove, Beatriz Castro, quien indicó que "el trazado entre Punta Moreiras y Monte da Serpe estuvo abarrotado de gente que disfrutó como nunca de este espacio natural, sobre todo en la jornada del domingo".
Está convencida de que "es muy importante poder disponer de este tipo de zonas en nuestro municipio, ya que ayudan a diferenciar nuestra oferta turística y sirven a los hosteleros para ofrecer alternativas a nuestros clientes cuando nos preguntan qué pueden hacer durante su estancia".
Castro anima a los responsables políticos a seguir en esta línea de acción y reforzar Punta Moreiras, tal y como se hizo durante el anterior mandato, a manos del alcalde conservador Miguel Pérez, pero también reivindica actuaciones similares en otros puntos de la localidad, como por ejemplo para embellecer y potenciar el entorno de O Carreiro y el yacimiento arqueológico de Adro Vello, o para dar continuidad al paseo de Pedras Negras-Con Negro a través del terreno que actualmente ocupa la Batería Militar.
Al hablar de este último paseo hay que recordar que hace ya muchos años, cuando se estrenó, se convirtió en una auténtica revolución. La fama del sendero creció rápidamente, y el hecho de transitar entre zonas hasta entonces casi inaccesibles, a través de zonas rocosas y sobre calas prácticamente vírgenes, hizo de aquel paseo un lugar de referencia para los turistas y los vecinos.
Así lo reconocían entonces comuneros de San Vicente, convencidos de que la parroquia salía ganando, y también hosteleros y empresarios que hablaban del paseo de Pedras Negras-Con Negro como un gran acierto y una ventaja añadida para el conjunto de la localidad.
Con el paso del tiempo aquel trazado está plenamente consolidado y se la considera una de las zonas más atractivas de la península meca. Las positivas reacciones que provocó entonces y los elogios recibidos por aquel paseo son los que se escuchan actualmente en relación con Punta Moreiras-Monte da Serpe, donde, por cierto, están pendientes de ejecución algunas actuaciones de mejora ya proyectadas por el anterior gobierno.
Si todo marcha según lo previsto, el mes que viene Costas del Estado podría iniciar la construcción de un nuevo sendero para completar la red actual, en este caso trazándolo por el litoral de la ría de Arousa, desde la Aldea Marinera y el Museo de la Pesca y la Salazón hacia la playa de As Pipas. Y aún quedará pendiente la recreación de una "casa terreña", para mostrar al visitante del espacio museístico cómo eran las viviendas de los marineros de antaño.
