Una pareja robó presuntamente dos veces a lo largo de esta semana en un mismo establecimiento comercial a pesar de que la Policía Nacional ya los había identificado tras su primera actuación. Así lo afirman fuentes de la empresa víctima de los hechos, un comercio de venta de piezas del automóvil que cuenta con una nave en Vilaxoán, junto a la carretera comarcal que une Vilagarcía y Cambados, y que está vinculada a la familia Santórum, que tiene un taller mecánico junto al Puerto de Vilagarcía.
"La Policía ya consiguió identificarlos después del primer robo gracias a las grabaciones de nuestra cámara de seguridad. Tenían sus nombres, su dirección, la matrícula del coche... Pero parece ser que no pudieron ir a detenerlos porque no tienen personal suficiente para actuar en todos los casos que les salen", manifestó ayer un portavoz de la empresa afectada.
Las pérdidas para la firma son cuantiosas. Los ladrones reventaron los cajetines de tres máquinas expendedoras de artículos, y se llevaron dinero y mercancía, además de dejar inservibles los aparatos. En la empresa aseguran que "no sabemos con exactitud cuánto dinero había en cada máquina. Sabemos que cada una tiene unos 400 euros en cambio, pero no sabemos a cuánto ascendía la recaudación de cada una. Además, se llevaron mercancía", y entre ésta había desde bebidas a alimentos, pasando por artículos eróticos, "que son más caros que las bebidas". Finalmente, el responsable de la empresa (conocida por muchos por su gran rótulo de "La Nave") sostiene que las tres máquinas atacadas quedaron completamente inservibles, y que entre las tres cuestan nuevas unos 15.000 euros.
Empezó el martes
La empresa explica que el primer robo fue sobre las 4 de la madrugada del pasado martes. Al parecer, la pareja llegó al lugar sobre esa hora y aparcó su coche a unos metros de distancia del establecimiento. Luego bajaron con una pata de cabra y cubriéndose la cabeza únicamente con las capuchas de unas cazadoras y se pusieron manos a la obra.
Siempre según el relato de los propietarios de "La Nave" la pareja (un hombre y una mujer) "reventaron las máquinas para llegar al cajetín del dinero y para ello destrozaron tanto el mecanismo interno como el electrónico de la máquina". Usaron supuestamente una papelera que había en el propio comercio y unas bolsas que llevaban ellos para transportar al coche tanto la mercancía como el dinero y se fueron ignorando presumiblemente que habían sido grabados por la cámara de seguridad del establecimiento.
Siempre según la empresa afectada, el martes por la mañana llamaron a la Policía Nacional cuando se percataron de lo sucedido, y llegó una unidad de la Policía Judicial, que tomó huellas del lugar y que, tras visionar las imágenes de la cámara de seguridad "identificaron a la pareja". "Pero como más tranquilos estábamos -añaden en la empresa- nos volvieron a robar".
El segundo ataque se produjo la pasada madrugada, entre las 1,30 y las 2 de la mañana. La forma de proceder de los supuestos ladrones volvió a ser el mismo que dos noches antes. Una vez más atacaron una de las máquinas con una pata de cabra y la reventaron, llevándose el dinero y parte de la mercancía. Pero esta vez parece ser que además de las cámaras les vio actuar un vecino o persona que pasaba por la zona en coche en ese momento.
Cuando los dueños de la empresa llegaron por la mañana se encontraron con los destrozos y al revisar las grabaciones vieron estupefactos "que eran los mismos del martes", aduce el trabajador de "La Nave". "Llamamos a la Policía, pero nos dijeron que como están tan mal de personal que no habían podido ir antes a buscarlos para detenerlos. Ni siquiera pudieron ir a buscarlos a su casa para meterles el miedo en el cuerpo. Pero dicen que están desbordados".
Siempre según el empleado de "La Nave" uno de los presuntos ladrones "es un hombre que salió hace poco de la cárcel", y añade que a media tarde de ayer "aún no lo habían detenido, hasta donde nosotros sabemos". "Lo que nos tiene indignados es que nos hayan robado los mismos individuos que ya lo hicieron el martes, y que lo hayan hecho dos veces pese a que la Policía ya sabía desde el primer robo como se llaman, donde viven y en que coche andan".
La pareja de sospechosos reside en Vilagarcía.
