Más de 350 estudiantes de conservatorios superiores de música de Galicia se dieron cita ayer en Cambados para participar en la tercera edición de "No bico un cantar", un programa del Consello da Cultura Galega y de la Consellería de Cultura que aúna música y literatura y que cada año se celebra en una localidad y está dedicado a un poeta.
En esta ocasión le correspondió a Cambados y Ramón Cabanillas, de modo que el coro de alumnos interpretó temas de varios poemas musicados del cambadés, entre los cuales se encuentra "Fala unha laverca", una pieza del libro "Da terra asoballada" cuya versión musical le encargó para este acto el Consello da Cultura Galega a la compositora Margarita Viso.
El evento contó también con la participación de numerosos estudiantes del conservatorio elemental de Cambados, que ejercieron de anfitriones, y está previsto que en 2016 se celebra en la ría de Vigo.
La previsión inicial era celebrar el festival en la plaza de Fefiñáns, pero posteriormente se cambió al jardín del pazo de Torrado puesto que las previsiones meteorológicas apuntaban a que a media tarde haría mucho calor, por lo que la organización optó por trasladar el concierto a Torrado, donde hay sombra. Sea como fuere no se logró completar el aforo de público previsto, y fueron algo más de un centenar las personas que se animaron a escuchar la actuación.
Los intérpretes provenían de los conservatorios superiores de las grandes ciudades gallegas, y se concentraron por la mañana en el salón José Peña, de donde se repartieron en grupos para conocer Cambados durante un paseo. Así, se acercaron hasta la torre de San Sadurniño o las ruinas de Santa Mariña Dozo.
El coro estuvo dirigido por Maximino Zumalave, que es el director de la Real Filarmonía de Galicia, e interpretó piezas como la "Aureana do Sil", que versionó en su día el catalán Federico Mompou. También hubo textos arreglados por otros autores de música culta gallega, como José Baldomir o Eduardo Rodríguez-Losada.
