En los muelles gallegos el sector productor se sabe de memoria los precios porque son las mismas tarifas que se aplican desde hace ya muchos años, más de los que algunos pudieron soportar.

El producto que se suministra a granel para el sector industrial puede oscilar entre los 0,24 euros y, en casos excepcionales, los 1,14 euros por kilo. El año pasado las barcadas oscilaron como media entre 0,45 y 0,48 euros.

El molusco destinado al mercado de fresco, el que pasa por depuradora antes de llegar a pescaderías, plazas, supermercados y restaurantes, parte desde los 0,45 o 0,50 euros que se pagan por el "lacasito", como se conoce al producto de menor tamaño, con hasta 55 piezas por kilo y muy apreciado en algunas partes de Europa.

A su vez, el mejillón bautizado como "europeo", de hasta 40 viandas por cada kilogramo, se comercializa a aproximadamente 0,55 euros, elevándose las tarifas a 0,60 o 0,70 euros para el molusco "normal", con hasta 37 piezas por kilo.

El mejillón "grande" o "especial", que se refiere al producto seleccionado y de mayor calidad, suele tener entre 21 y un máximo de 27 piezas por cada kilogramo y se entrega en los muelles a alrededor de 0,90 euros, según confirman en diferentes asociaciones. Pero claro, a veces esas tarifas resultan inalcanzables y los precios se tiran por los suelos.