En Vilagarcía incluso quedan carteles electorales que llevan nada más y nada menos que una década pegados a una pared. Es el caso de uno en la céntrica plaza de O Castro, concretamente en una de las ventanas del edificio en ruinas que tantas veces salió en prensa por su estado calamitoso. El político que lleva diez años inmortalizado en ese inmueble es el nacionalista Anxo Quintana, que se presentó por última vez como candidato del BNG a las elecciones autonómicas en 2005.