Perder una plaza tan importante como Cambados sería un duro golpe para el Partido Popular de la comarca, por lo que la formación que lidera Luis Aragunde está tratando de maniobrar para atraer al candidato de Cambados Pode, formación que nada tiene que ver con los Círculos de Podemos y varios de cuyos integrantes tienen pasado en las filas conservadoras.

En esa estrategia de conseguir mantener la Alcaldía se han implicado el vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, y el delegado territorial en la provincia, José Manuel Cores Tourís, que en compañía de Aragunde participaron en una comida con una persona del entorno de Abal.

Esa comida se celebró en un conocido restaurante de As Sinas, Vilanova, la pasada semana, y en ella se pusieron encima de la mesa las contrapartidas que están dispuestos a ofrecer a Abal Varela a cambio de su apoyo en la investidura, que se va a celebrar el próximo día 13. El propio Aragunde reconoce que "vamos a tener contactos con Cambados Pode en los próximos días para acercar posturas, no vamos a precipitarnos cuando todavía quedan dos semanas para el pleno de investidura", aunque niega que en la comida en cuestión se llegasen a abordar cuestiones sobre posibles pactos.