Pedro Sánchez, uno de los cuatro candidatos a suceder a Alfredo Pérez Rubalcaba como secretario general del Partido Socialista (PSOE), visitó ayer Galicia en un recorrido en busca de avales para su candidatura que arrancó en la Casa do Pobo de Vilagarcía. Allí, Sánchez tuvo un encuentro con la militancia local para darse a conocer y explicar las líneas políticas de su proyecto. También habló ante los medios para criticar, entre otras cosas, el aforamiento exprés del rey, la reforma fiscal impulsada por el ministro Montoro y el apoyo de su partido al candidato conservador Jean-Claude Juncker como presidente de la Comisión Europea.
En lo que respecta a Galicia, Pedro Sánchez hizo referencia a que la comunidad "está yendo en dirección contraria al resto de Europa. Antes del gobierno de Feijóo se apostaba por las energías renovables, ahora es al revés. Las renovables suponen una fuente de riqueza y empleo que podrían ser muy beneficiosas en Galicia". Recordó también el fallido concurso eólico que había sido convocado durante el gobierno autonómico presidido por Pérez Touriño.
Sánchez visitó una Comunidad en la que no ha recibido el apoyo explícito de la dirección nacional, pero sí que cuenta con la simpatía de buena parte de las direcciones locales, como es el caso de la de Vilagarcía. A nivel autonómico, fuentes cercanas al PSOE apuntan que la "batalla" electoral se dirimirá entre el propio Sánchez y Eduardo Madina.
Temas nacionales
El candidato madrileño nacido en 1972 comenzó su intervención en Vilagarcía oponiéndose a la postura de la dirección del Partido Socialista de apoyar con su voto la elección del conservador luxemburgués Jean-Claude Juncker como nuevo presidente de la Comisión Europea. "No estoy a favor de las grandes coaliciones con la derecha en España y de igual modo tampoco las apoyo a nivel europeo", reconoció, pidiendo en consecuencia a Ferraz que no dé su visto bueno a la candidatura de Juncker.
Por otra parte, Pedro Sánchez hizo una apelación al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, exigiéndole que "deje de mentir ya a los españoles. La reforma fiscal que promueve supondrá grandes rebajas para las clases altas, escasas para las bajas y serán las clases medias las que compensen esta reducción de ingresos del Estado".
Sobre el aforamiento del rey Juan Carlos I, admitió que él no se mostraba a favor de pactar con el Partido Popular un medida como la que está promoviendo el Gobierno de Mariano Rajoy. "No se puede tramitar una reforma como esta de modo exprés. Es una decisión que merece ser meditada y debatida. No acepto la propuesta de aforar al rey por la vía urgente", recalcó.
Asimismo, y en este mismo sentido, Sánchez también se postuló "a favor de replantearse el aforamiento de los diputados autonómicos y nacionales", recordando que él mismo pertenece a la Cámara Baja.
Más voz para las bases
"Mi intención es que los militantes no solo voten en congresos o primarias, sino también en otros asuntos del partido", comentó Pedro Sánchez en Vilagarcía. El madrileño especificaba que hacía referencia a "temas nuevos y de relevancia" en los que el PSOE no tuviese una postura definida previamente.
La estrategia del candidato a suceder a Rubalcaba ha ido precisamente por la línea de recorrer el país para darse a conocer a él y a su equipo. En Galicia ya había estado meses atrás pulsando el ambiente y ahora, ya en campaña de recogida de avales, regresó para comprobar que buena parte de las direcciones locales y los militantes le consideran una alternativa real al otro gran candidato, el vasco Eduardo Madina.
Tras pasarse por Vilagarcía, Pedro Sánchez se desplazó a Pontevedra, donde almorzó con los socialistas de la capital, a Ourense y, finalmente, a Vigo.
