La asociación de vecinos Golpelleira, en el barrio vilagarciano de A Torre, se reunió ayer en asamblea general ordinaria para hacer balance del primer año de la nueva directiva, presidida por José Antonio Cora Mouriño, uno de los fundadores del colectivo en 1978 y que después de tres décadas ha vuelto a ponerse al frente del movimiento vecinal. Aparte de aprobar las cuentas y el plan de actividades, la junta directiva dio cuenta de sus gestiones realizadas para lograr mejoras para el barrio. Una de las principales demandas de A Torre es la renovación de toda la red de alcantarillado, construida en 1983 ya con defectos de obra.

El presidente de la asociación, que en aquella época era concejal en el Ayuntamiento, así lo afirma. "Aparte de que la red es bastante antigua, los colectores son de fibrocemento, un material que con la acción de los detergentes se va deteriorando hasta llegar a desaparecer en algunos sitios. Se producen inundaciones y filtraciones, y zonas donde se hunde el terreno", explica Cora, que no olvida la orografía del barrio (con cuestas), la cual contribuye a las incidencias en el alcantarillado.

Recuerda que la dotación de alcantarillado al barrio de A Torre costó hace 31 años 5 millones y medio de pesetas y que aunque estaba previsto que los trabajos durasen unos pocos meses, finalmente se prolongaron dos años. "Y se hicieron en malas condiciones", insiste.

El portavoz vecinal se muestra consciente de que la renovación de todo el alcantarillado del barrio -ya no queda ninguna vivienda sin conexión a la red pública- no puede resolverse a corto plazo, sobre todo por el coste que ello supone. Pero A Golpelleira reclama al Concello que tengan en cuenta esta necesidad y que "ponga los medios técnicos para realizar un proyecto básico de mejora y renovación de la totalidad de la red de alcantarillado de fecales". Proponen que la obra se vaya ejecutando de forma gradual, por fases.

Las actuaciones más urgentes se localizan en el colector de la avenida de Berdón, el cual se encuentra en "un estado defectuoso". Su mal estado y los sucesivos temporales del invierno provocaron que dos viviendas sufrieran serias inundaciones, ocasionando en las casas "daños cuantiosos", dicen los vecinos.

Mal uso

El colector de la calle Murado "sufre múltiples atascos y, como toda la red, adolece de defectos de obra" .

La asociación vecinal considera que aparte de la antigüedad y la precariedad con la que se ejecutase la instalación del alcantarillado en A Torre hace treinta años, en el deficitario estado de la red también influye la acción humana mediante el depósito de objetos en los inodoros que atascan y desbordan las canalizaciones, como compresas o toallitas higiénicas. Ante esta situación, el colectivo solicita al Concello una campaña informativa sobre el buen uso de la red. "Estamos dispuestos a colaborar con el Ayuntamiento", tiende la mano Cora Mouriño.

La asociación contrata por su cuenta campañas puntuales de limpieza. Actualmente está en marcha una de pluviales.