El escaso número de vilagarcianos que solicitó la rebaja del 5% de la contribución de 2014 -una bonificación para rentas ínfimas- y el considerable índice de morosidad - un 15%- en los impuestos municipales han llevado al Concello de Vilagarcía a embarcarse en una campaña de información fiscal que llegará a todos los hogares de la ciudad. El alcalde, Tomás Fole, anunció ayer que los técnicos ya están elaborando una díptico para enviar a todos los domicilios que contenga un calendario con los periodos de pago de cada tributo y las distintas bonificaciones y facilidades de pago existentes, como fraccionamientos y aplazamientos.
Fue el grupo de Esquerda Unida el que solicitó mediante una moción la realización de un buzoneo generalizado para informar a todos los vilagarcianos. El gobierno conservador, consciente de esa necesidad, apoyó la iniciativa, aunque por el momento desconoce cuántos folletos se editarán y cuándo llegarán a las casas.
Aunque la crisis económica está ahí, y con ella la pérdida de poder adquisitivo de los vecinos y el consecuente aumento de recibos impagados -en 2013 el Concello embargó cuentas por importe de 2,2 millones de euros-, también hay contribuyentes sin el cobro de impuestos domiciliado que desconocen los periodos de pago o se despistan del mismo, y otros que cumplen las condiciones para poder aplazar o fraccionar los recibos que no lo saben y que quizá si se acogiesen a los plazos que facilita Ravella podrían asumir sus obligaciones fiscales.
Por tanto el envío de un folleto informativo a todos los domicilios de Vilagarcía podrá servir para intentar reducir en mayor o menor medida la morosidad en el pago de impuestos locales, o al menos, mermar el retraso en el abono.
La campaña también está pensada para que los vecinos puedan hacerse "una planificación tributaria" -dijo Fole- de todo el año y de este modo saber cuándo deben pagar las tasas e impuestos, ya sea si los tienen domiciliados -es la situación de la mayoría de contribuyentes- como si optan por pagar en ventanilla.
El Plan de Ajuste se marca como objetivo un incremento anual de la recaudación del 2%, y en 2013 el Concello consiguió un 1%, fundamentalmente gracias al refuerzo en materia de tesorería.
El alcalde, Tomás Fole, se mostró ayer extrañado de que algunos vilagarcianos no paguen sus impuestos cuando tienen dinero en la cuenta. "Muchas veces se da la sorpresa de que no hay efectivo en las cuentas, y otras personas que tienen saldo no hacen frente a sus obligaciones fiscales, no se entiende", expresó el regidor en relación al cuantioso importe que en 2013 el Ayuntamiento tuvo que embargar a los vilagarcianos de sus cuentas bancarias.
El primer edil apuntó que el índice de morosidad continúa en un 15%. "Esos dos millones y pico que el Concello no va a cobrar, pues tendremos que hacer una serie de ajustes, racionalizar más el gasto, a lo mejor ser más austeros, como hace cualquier economía familiar", compara Fole.
También existe morosidad en el pago de multas de tráfico, no solo de impuestos. El Concello publicó ayer en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP) una nueva oleada de notificaciones de sanciones -89 concretamente- para reclamar el pago a los infractores. Los importes oscilan entre los 40 y los 500 euros.
La liquidación del Presupuesto de 2013 en la que se incluye un amplio informe sobre la recaudación municipal se llevará al pleno del próximo lunes 28 de abril, que se celebra a las cinco de la tarde. Otros temas que se debatirán en sesión plenaria son la ordenanza de playas -el texto definitivo- y una moción del BNG en la que solicita al Concello la revisión al menos desde el año 2009 de todas las facturas de consumo eléctrico de edificios municipales para detectar posibles errores en el cobro. Por su parte, Esquerda Unida lleva una moción que reclama el cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica.
