El alcalde de Vilanova y presidente de la Mancomunidade do Salnés, Gonzalo Durán, manifestó ayer a preguntas de FARO que "es una pena que no nos hubiesen pedido que además de conseguir los terrenos redactásemos el proyecto (de ampliación del hospital), porque lo hubiésemos hecho sin tardar un año y ahora ya estaría listo".

Durán, que es médico de profesión, ha manifestado en múltiples ocasiones que es necesaria la ampliación del Hospital do Salnés, y se ocupó personalmente de la gestión de comprar los terrenos donde se van a hacer las obras. La Consellería de Sanidade de la Xunta de Galicia puso como requisito inexcusable para acometer la ampliación disponer de los terrenos, y pidió una parcela situada en el término municipal de Vilanova.

Durán adquirió la parcela y pidió un préstamo a la Diputación, que posteriormente devolverán los ayuntamientos de O Salnés que utilizan el hospital arousano. La finca se le entregó a la Xunta a finales del año pasado, pero desde entonces no se ha movido ni una piedra en ella.

La gerente del Sergas manifestó esta semana que el proceso de licitación del proyecto está parado porque se presentaron cinco recursos. Según Nieves Domínguez, uno de ellos entró en el registro de la Xunta el 10 de este mes y está pendiente de resolver. Preguntado sobre esta circunstancia y si la mancomunidad hubiese asumido también la redacción del proyecto para agilizar los plazos, Durán admitió a FARO que sí, y que en ese caso ya estaría superado ese trámite administrativo.

La Xunta sacó a licitación la redacción del proyecto en agosto del año pasado, pero nueve meses después todavía no se ha contratado. Una demora que comienza a impacientar a los alcaldes del PP de la comarca, pero también a muchos ciudadanos consultados ayer por este periódico. El vilagarciano Luis Ferreiro, por ejemplo, considera que "tendrían que haberlo ampliado ya hace mucho, porque se ha quedado pequeño para la población que somos".

Ferreiro opina, asimismo, que en la situación actual casi convendría más "construir uno nuevo, pero más grande, en vez de ir haciendo las obras de planta en planta". Otro arousano, José López, cree que "nos están mintiendo constantemente", en referencia a los responsables políticos, y cuenta dos casos de su experiencia en las que sufrió en primera persona la carencia de quirófanos. "Esto no es un hospital, es un ambulatorio", lamenta.

Otros ciudadanos entienden que se está gastando demasiado en inversiones superfluas y que la sanidad es un servicio "prioritario", en palabras de Aquilino Casalderrey. La demora que arrastra la ampliación del hospital también molesta a sus trabajadores. El médico Ramón Barreiro, que forma parte del sindicato CESM-Omega opina que la alusión al recurso de mayo "es una nueva tomadura de pelo" y "la excusa perfecta para que 2013 sea otro año perdido".